miércoles, 26 de enero de 2022

Gente que no debería morirse



Hay gente que no debería morirse jamás, como es el caso de Paul Newman. De haber sido posible mi deseo, hoy, 26 de enero, hubiera cumplido 97 años. Hace ya casi 14 años que nos dejó. Además de un grande entre los grandes, fue un inteligentísimo actor a la hora de escoger sus papeles, incluso en sus últimos años en activo en los que no le importó ser bisagra de protagonistas principales ('Camino a la perdición', 'Al caer el sol') o hacer películas tan pequeñas como estupendas, caso de 'Ni un pelo de tonto'.

Nunca tuve dudas sobre su mejor papel cuando me han apurado a la hora de elegir uno. El torturado Eddie Felson de 'El buscavidas' fue el mejor rol para demostrar, cuando apenas tenía 35 años, de lo que era capaz. Aun estaban por venir 'La leyenda del indomable', 'El golpe' o aquella maravillosa gamberrada que fue 'El castañazo'. Pero en 'El buscavidas', el monólogo final de Newman ante George C. Scott donde el perdedor es más débil que nunca porque le corroe el remordimiento por el trágico final de Sarah Packard, es de tal nivel interpretativo que se convierte en uno de los mejores momentos de la historia del cine.

El año pasado, con motivo del Día Internacional del Jazz (30 de abril) hice un videorreportaje subido al canal de Youtube #UltimoEstreno sobre la banda sonora que Kenyon Hopkins compuso para 'El buscavidas'. Hoy es un buen día para recordar a Paul Newman a través de esta película y su música.

Os dejo el enlace: https://youtu.be/ikKggodJI4U

martes, 25 de enero de 2022

Aurora Guerra, guionista de 'El secreto de Puente Viejo' y 'Arrayán': "Censura en mi línea editorial no he sufrido, pero 'no pises este callo' sí que me lo han dicho"



Aurora Guerra tiene entre sus virtudes como guionista haber sido la creadora de la serie con mayor número de capítulos emitidos en televisión: 'El secreto de Puente Viejo', un drama de época que viene a sumarse a las producciones basadas en otros guiones de su autoría como 'Arrayán' o 'Acacias 38', además de una serie de capítulos de 'Aquí no hay quien viva'.

En #UltimoEstreno la hemos entrevistado -aprovechando que ha estado en Cádiz para impartir unos cursos en la Escuela de Cine de la Universidad de Cádiz que dirige Bruto Pomeroy Chiquillo- para que nos hable del proceso de creación de un guión hasta plasmarlo en una serie o en una película, si alguna vez ha sufrido censura al escribir o incluso sobre la actual competencia que suponen las series procedentes de Turquía.

Pincha en este enlace para acceder a la videoentrevista: https://youtu.be/7jK_sOgFCG8

sábado, 22 de enero de 2022

Se ve otra cosita



Mira que le han llovido críticas a Fede San Emeterio hasta hace... no sé, creo que unas horas o así. Hasta cierto punto es lógico porque si un equipo tiene cada fin de semana más mala cara que un chino vomitando, lo lógico es darle un chute de futbolistas con ínfulas y de élite. Pero el pedigrí amarillo rara vez ha venido por los nombrecitos, sino por fajarse bien a la hora de pelear en el campo y dejarse la piel en él para cubrir con huevos lo que el dinero hace posible en clubes ricachones. Y este parece ser el caso del centrocampista cedido por el Valladolid, que me recuerda mucho a aquel Roberto Suárez de allá por los años 2003 a 2005, jugador de lucir menos que las luces de Navidad de Cádiz en la época Kichi pero imprescindible en el necesario trabajo sucio del centro del campo para destruir o crear, que es lo que ha hecho hoy San Emeterio, entre otras cosas. Porque el gol de Salvi viene de la presión que el cántabro ejerce (¡oh, presión arriba del Cádiz! ¿La recuerdan?) hasta lograr que el balón llegue a Alejo que hace el regate de su vida (al menos desde que está en el Cádiz) y le pone la pelotita al siete.

Hablando de Alejo, el fútbol es así de impredecible, nadie daba un duro por él y ahora está ahí por pesado, a base de desesperar a los contrarios, gritar como un desollao cuando le rozan para que árbitro pique y pite una falta y sobre todo, meterle el dedo en el ojo hasta al apuntador del otro equipo, que terminan cabreados tras acudir al capote. Por cada tarjeta a Alejo por bronquista, dos al otro equipo. Nos vale por el momento.

Hoy hemos vuelto a demostrar que en las primeras partes somos como los televisores vanguard antiguos de válvulas, ¿se acuerdan? Aquellos que había que encenderlos con media hora de antelación para que se calentaran antes de ver 'Ese señor de negro' o 'Los Botejara'. No nos activamos ni de coña y dejamos ver que no somos precisamente virtuosos del balón. Ni falta que hace si, tras aguantar el arreón, dejamos que el contrario se calme tras pegar sus bocaos al aire y en las segundas partes nos quitamos los complejos, demostrando que defender es compatible con presionar en la línea de arriba para soltar la caña y dejar que Negredo haga lo que mejor sabe hacer. ¿Recuerdan lo que dije el otro día? Pues eso.

Insisto en que, si nos traemos un delantero solvente dentro de nuestro estilo, la situación se revertirá. Porque repito que no me gusta el Choco ni como amigo, no vaya a ser que le dé coraje que pase por su lado y me pise o me pegue un codazo aunque sea sin querer.

Hoy se ha estrenado Alcaraz. Al final ya verás que vamos a aprovechar que el Pisuerga pasa por Valladolid...

Foto: Roberto Suárez disputando un balón con un jugador celtiña en aquellos años...

lunes, 17 de enero de 2022

'Belfast', de Kenneth Branagh




No cometáis el error de pensar que #belfast es una película localista sobre el conflicto irlandés entre protestantes y católicos y que vamos a ver un filme de violencia callejera y tensión política. No digo que, obviamente, no aparezcan ambas cosas, pero la última película de Kenneth Branagh es mucho más que eso. Es un homenaje a quienes sufren cualquier tipo de diáspora contado a través de los ojos de un niño que en ningún momento provoca repelencia. Son los ojos del propio director que refleja la amargura de la intolerancia vivida en sus carnes y en su tierra, trasladables -insisto- a otros escenarios. Está tan acertadamente contado que el pequeño se hace hombre en su interior. "¿Tú qué es lo que quieres hacer?", es la pregunta que aparece estratégicamente a lo largo del filme en boca de sus abuelos cuando surge el espinoso tema de abandonar la capital irlandesa, idea promovida por su padre. Buddy solo quiere que la niña de la que está enamorado le coja las flores que le regala, ir a la luna, al cine y matar dragones imaginarios. Conforme avanza el metraje, el pequeño se verá obligado a cambiar sus respuestas y madurar ante los acontecimientos.

A #belfast quizás le pierde el congénito academicismo de su director y el humor a pinceladas tan británico que la vuelve liviana en su mensaje. Dejando a un lado ambas cosas, es una de las mejores películas realizadas en 2021, un homenaje al cine a través de clásicos inolvidables que van apareciendo en pantalla, y el 28 de enero de 2022 se estrenará en España.
Os invito a verla y para que vayáis con una idea al respecto, os dejo la videocrítica en el canal de Youtube #UltimoEstreno, al que os invito que os suscribáis si no lo estáis aun. ¡Gracias!
La foto de arriba es de la madre del niño protagonista, interpretada por la actriz Caitriona Balfe. ¡ABSOLUTAMENTE ENAMORADO DE ELLA desde que vi la película en la clausura del Festival de Cine Europeo de Sevilla!
Enlace para ver la videocrítica: https://youtu.be/l7hvCXnzGyM

martes, 11 de enero de 2022

La Academia de Cine, ajena a la difusión telemática de sus actos


La Academia de Cine me envía una convocatoria para medios en la que se anuncia la comparecencia de José Sacristán para el jueves 13 de enero en su sede en Madrid. Ni este encuentro de relevancia para los medios y la propia Academia, ni
ningún otro acto de esta institución, se emiten por internet. La Academia de Cine parece no querer enterarse de que los tiempos han cambiado.

Te lo cuento en este 'En corto y de paso' subido al canal #UltimoEstreno de Youtube: https://youtu.be/OXVfVns3SlM

lunes, 10 de enero de 2022

'El páramo'. ¿Dónde está el guión?



Existen dos maneras de rodar una película de terror. Las buenas son las que cuentan con un guión de verdad que provoca una sucesión de efectos-patrones emocionales dirigidos al espectador para acojonarlo. Las malas se olvidan de la historia que cuentan porque, simplemente, no hay nada que decir, y dado que hay que hacer algo durante dos horas, engañan al personal con una sucesión de efectos especiales, de sonido y oscurecemos la pantalla para que estos timos se vean lo menos posible.

A pesar de la cosecha que tenemos desde hace décadas de buen cine de terror catalán, el recién estrenado David Casademunt no ha optado ni siquiera por el efectismo tradicional, sino que ha preferido confiar el éxito de su ópera prima a los resultados que te aportan los profesionales que trabajan para ti. Pero por mucho que cuentes con una preciosista fotografía, encuadres de paisajes tan pretendidamente perfectos que resultan fríos, una banda sonora notable (las connotaciones con 'El bosque' de James Newton Howard se me aparecieron como un fantasma, provocándome la película al menos sensaciones por vez primera) y otras excelencias técnicas que hoy día tanto han avanzado, si no hay guión, no hay película.

Te lo cuento en la videocrítica con la que inauguramos el año 2022 en el apartado de análisis de películas en el canal #UltimoEstreno.

Ah, y unos apuntes iniciales al gatillo fácil que tenemos con tanto 'actor maestro' y películas 'obras maestras'.

Pincha en el enlace y ahí la tienes o en la imagen superior: https://www.youtube.com/watch?v=q_QhZGIjsp8

martes, 4 de enero de 2022

40 años del ZX Spectrum. II: Emilio Salgueiro



Emilio Salgueiro era un talento precoz. Con tan solo 15 años -nació en 1970- ya era un portento ideando programas para los ordenadores de la época, primero el ZX Spectrum, después convirtiendo sus juegos para el Amstrad, el MSX, Commodore...

Junto con Enrique Cervera creó varios de ellos que enviaron para probar suerte a Dinamic, la casa de software más sonada a mediados de los ochenta en España y que habían lanzado juegos como 'Camelot Warriors', 'Sgrizam' o 'Abu Simbel Profanation'. Dinamic había dispuesto una división que hizo llamar 'Future Stars', que tenía como objetivo servir de plataforma de lanzamiento a jóvenes valores con productos experimentales y de menor precio de venta en el mercado. Cuando los hermanos Ruiz comprobaron la calidad del material enviado por Emilio y Enrique a mediados de 1986, decidieron que aquellos juegos deberían llevar el sello Dinamic directamente.

Gracias a Emilio Salgueiro salieron al mercado títulos sagrados del software español, como 'Phantomas', su segunda parte y 'Freddy Hardest'. Aquellos juegos contribuyeron a olvidar el bache que Dinamic comenzó a sufrir cuando sus seguidores se mostraron bastante fríos con la salida de títulos que no convencieron como 'West Bank' y especialmente 'Olé toro'. Podemos decir que la empresa salió adelante gracias a Emilio Salgueiro y a varios nombres más, pero sin olvidar que el primero creó el 'Freddy Hardest', uno de los grandes éxitos de todos los tiempos para ordenadores personales.

Emilio Salgueiro había nacido en San Fernando. Conoció a Enrique Cervera en Castellón y, tras un periodo en esta ciudad, regresó a la localidad gaditana, donde había estudiado en el Instituto Wenceslao Benítez. Intercaló también sus estudios con algunas estancias en Alemania, donde realizó tareas investigadoras en computación paralela, lógica difusa, visión artificial e inteligencia artificial. De hecho, obtuvo algunos resultados meritorios, que le permitieron publicar algunos artículos en el campo de robótica y, más concretamente, en visión artificial. Finalmente volvió a San Fernando y empezó a trabajar como investigador en la Universidad de Sevilla.

Emilio, a quien conocíamos en Sirius y nos contaba y adelantaba cosas de los juegos que Dinamic iba a publicar, murió en 1996, con tan solo 26 años. Lo atropelló un coche cuando iba con su bicicleta, vehículo que utilizaba habitualmente.

En 2021 se han cumplido 25 años de la muerte del isleño Emilio Salgueiro. Ni en su momento, ni ahora, se le ha reconocido en su tierra natal, en su localidad o en su provincia, lo que fue capaz de hacer como visionario de la informática y de la cultura de los videojuegos. Es más, estoy convencido de que no hay un político, ni un mandamás responsable de la cultura institucional, que sepa quién fue Emilio Salgueiro. Ni siquiera para haber puesto en marcha un patronato, una fundación, un fondo cultural o una institución incluso juvenil, que hubiera creado un premio a nivel estatal para jóvenes talentos de la programación y que hubiera puesto en el punto de mira a San Fernando en un ámbito que, desde hace años, sabemos que es el futuro. Desde la creación de software general hasta la industria del videojuego, que mueve hoy día millones de euros. Haber contado con patrocinadores para esta iniciativa solo hubiera sido cuestión de trabajar. Trabajar en lo que se conoce, en lo que se supone que se sabe, inventar, contar con quienes conocen el paño de las cosas... ¿Les suena a algunos y a algunas?