martes, 16 de abril de 2024
Jaime Chávarri: «No entiendo la nostalgia por el celuloide en tiempos en los que el digital es fantástico»
sábado, 13 de abril de 2024
«Osario Norte», la película documental que reivindica la figura del actor Jorge Rigaud
Varias horas antes del estreno en Cádiz de «Osario Norte. Los últimos días de San Valentín», os cuelgo esta entrevista que ayer viernes hice a su director, José Manuel Serrano Cueto, y al productor Jorge Rivera, en la que hablamos sobre la película documental que trata la figura de Jorge Rigaud (1905-1084), aquel popular San Valentín de la película «El día de los enamorados». Un actor que hizo numerosas películas, en las que se codeó con nombres de estrellas como Rita Hayworth, Alain Delon o Christopher Lee.
Rigaud terminó sus días en el olvido de todos, y sus restos se encuentran en una fosa común, el Osario Norte del cementerio de Leganés. Tanta ignominia causó estupor en Serrano Cueto, que ha trabajado en este filme durante los últimos años, realizando un documental que entremezcla gradualmente el género documentalístico y los ingredientes del thriller policíaco con las emociones de la mano de testimonios de quienes conocieron a Rigaud.
Este sábado 13 de abril, y con la sala de cine al completo, se proyecta «Osario Norte». En mayo se presenta en Madrid y posteriormente en Málaga. En próximos meses podrá verse en los cines y en plataformas. La historia de esta película nos la cuentan su director y su productor en una entrevista distinta a las que puedan hacerle otros medios. Como siempre, en #UltimoEstreno
Enlace al vídeo con la entrevista: https://youtu.be/BY3yJ5Dj404?si=pfCCO8hXBGkU44Fo
lunes, 8 de abril de 2024
Si sale esto en el Falla en febrero, los queman
Yo, de todas maneras, pienso que un hábito penitencial no debería ser un disfraz. Ni para unos ni para otros. Pero hace mucho tiempo que se olvidó realmente el significado y la profundidad de una túnica.
Curiosa vara de medir o doble moral, la de los que se hacen llamar cofrades.
Y un apunte para los que mandan en los gobiernos, apovechando que se saca pecho por todo: la cultura fagocitada por los políticos no es cultura: es una poderosa arma de manipulación.
domingo, 7 de abril de 2024
«La primera profecía», secuela de la emblemática película «La profecía» de Richard Donner
«La primera profecía» (Arkasha Stevenson, 2024) produce sensaciones enfrentadas. Se agradece el intento por hacer una película digna en un género de gran pobreza guionística actualmente. Hay un esfuerzo por hilvanar una historia con el gran inconveniente que supone preludiar una notable obra icónica como fue la película de Richard Donner. Pero me cuesta trabajo meterme en ella cuando, a lo largo de la primera hora, tengo la impresión de estar viendo un filme para adolescentes que además no me resulta creíble en el ámbito en el que nos movemos.
Que dos novicias residentes en un estricto orfanato religioso romano decidan irse de picos pardos una noche días antes de tomar sus votos o que la protagonista acuda de madrugada al apartamento de un sacerdote por el mero hecho de encontrarse con él en una plaza pública son cosas que me chirrían bastante en un filme que paulatinamente va alzando el vuelo entre intrigas de hallazgos de señales diabólicas, investigaciones detectivescas, momentos álgidos deudores del filme de 1976 (la monja que se lanza en el balcón, el brutal atropello del joven italiano, etc.), algunos sustos baratos propios del género y el esperado momento musical en el que surge el «Ave Satani» de Jerry Goldsmith, que aparece justo cuando debe hacerlo como culmen de un ritual algo aparatoso y maniqueo como el tratamiento ya manido que se le da a la Iglesia en todo este embrollo en el que Bill Nighy encarna a un cardenal pero a mí me da la risa floja porque, a pesar de su dilatada carrera, no puedo dejar de imaginármelo como el estrafalario rockero de «Love Actually». Es cosa mía, lo reconozco.
Videocrítica de la película con más cosas en el canal #UltimoEstreno en este enlace. Ah, y recadito, a modo de preludio, dedicado a los/las gilipollas que no saben estar en una sala de cine: