martes, 28 de abril de 2009

Cerdos, gripes y paro

No sé si preocuparme más por la gripe porcina o por la pandemia que padece España a causa del desempleo. Viendo la cantidad de individuos/as pendientes del vestido de Carla Bruni en su visita a ZP (le recuerdo a los despistados que viene acompañando a un tal Nicolás Sarcozy, que dicen que es el que realmente parte el bacalao en un país de por ahí afuera llamado Francia), parece que muchos no tienen la más mínima intención de desazonarse por una u otra razón.

Lo de la fiebre por los cochinos parece que hay que tenerlo en cuenta, pero lo veo lejano. Quizás Dios me castigue y cuando termine de escribir empiece a soltar mocos como Linda Blair en El exorcista, pero por el momento los pulmones no me duelen por algún fenómeno tusivo. Es el alma el que me rechina cuando veo a vecinos en paro y escucho a través de las paredes conversaciones que te erizan el vello y sin necesidad de poner la oreja, porque llega un momento en el que la desesperación sale del pecho para convertirse en clamor que no deja de ser un estéril lamento de desahogo.

Tampoco hace falta estar pendientes de las familias de tu entorno. A una buena amiga la echan en un par de días de una agencia de noticias simplemente por haber mostrado su desacuerdo con la nueva política de pago de las piezas de las informaciones que redactan y las medidas implantadas por algún cerebro privilegiado especialista en cargarse la vida laboral de seres humanos. Y un par de grupos de comunicación de peso ya se han puesto de acuerdo para cerrar cabeceras en el mapa andaluz y no hacerse más daño en una guerra que van a perder los soldados a pie de batalla y no los ministros ni presidentes. Entre esos acuerdos hay algunos que afectarán a muchos periodistas gaditanos que ni siquiera saben nada de esto y tienen hasta final de año para buscarse la vida. Mientras y en otros grupos de apenas unos miles de lectores según el último EGM, y con un mensaje ya manido y trasnochado, se sigue exigiendo más a los periodistas mal pagados con amenazas de mandarlos a la calle. Porque al final la culpa del cierre la tendrán los periodistas. Como la culpa de que Alemania se quedara reducida a cenizas hace casi setenta años la tuvieron los judíos, los rojos, los masones y los americanos. La mentalidad hitleriana se lleva hasta el final de los días, hasta cuando se aprieta el gatillo, hasta cuando se deje de accionar el botón de la rotativa. Genio y figura. Mantengo que los periodistas tenemos la culpa de muchas cosas por permitirlas y unos cuantos deberían de no dormir tranquilos. Pero esos desgraciados y tristes chupaculos no suman lo suficiente como para culparlos de la existencia de monstruos sin más escrúpulos que construirse chalets a pie de playa e irse de putas.

Vamos camino de cinco millones de parados y esto se escapa de las manos. Resulta curioso que José María Aznar vuelva a mostrar sus delirios mesiánicos y salga a la palestra para decir que con él no habría desempleo en España. Curioso y tocapelotas que es, porque si esta crisis mundial se gestó en su momento, fue entre otras cosas porque algunos decidieron llevar a cabo una política internacional absolutamente equivocada. Tanta soberbia no beneficia al partido que llegó a presidir, que recorta puntos ante la desesperación del personal. En una interesante conversación que mantuve el sábado, un amigo y joven empresario gaditano me llegó a decir que si las cosas siguen así no sería malo que el PP volviera a gobernar, ya que asevera que ello 'movería' la economía y crearía una sinergia distinta en la circulación del dinero y su destino. Crítico con los sindicatos a los que califica como 'el cáncer de la democracia', me insistió en que empresario y trabajadores necesitan un equilibrio entre derechos y deberes que no ofrecen ahora las centrales sindicales. Hace falta encontrar el sistema, pero entonces estaríamos poniendo en entredicho este tipo de democracia. Y eso espanta a todos.

lunes, 27 de abril de 2009

Aritz Villodas, un nuevo valor en Úbeda'09

La V edición del Festival Internacional de Música de ‘Cine Ciudad de Úbeda’, que se celebrará del 16 al 19 de julio en la localidad jiennense, amplía su nómina de invitados después de haber anunciado la presencia de compositores de renombre como Joe Hisaishi, Christopher Young o Michael Giacchino. En concreto, la organización tiene ya cerrada la presencia en el festival de Aritz Villodas, autor del himno oficial de la asociación BSOSpirit, organizadora del festival.

Aritz Villodas nació en Portugalete el 5 de enero de 1976. Con cinco años inició estudios de solfeo y a los diez comenzó a tocar el piano. Actualmente trabaja en el campo de la ingeniería acústica, sin olvidarse de la composición. Ha creado varias obras, casi todas para piano o en formato midi. Ha escrito la música de cortometrajes como Ondas paralelas (2003), Pa ti pa siempre (2003), First Minute (2003), Un héroe de acción (2004) o Perpetuum Mobile (2006), por el que fue finalista a los premios Jerry Goldsmith en la categoría de mejor música en cortometraje de animación. Trabajó en el largometraje Ellos son noche (2002) y en 2008 se ha estrenado la película No me pidas que te bese porque te besaré, que contiene algunas melodías de gran elegancia y belleza y que han llamado la atención en el conjunto de la ópera prima cinematográfica de Albert Espinosa.

Además de su faceta como compositor y pianista, también ha realizado trabajos como orquestador, arreglista e ingeniero de sonido. En su página web oficial (http://www.aritzvillodas.com/) puede conocerse mejor a este compositor, estrechamente vinculado al Festival.

Os adjunto un enlace de un vídeo promocional realizado por la organización del Festival relativo al nuevo invitado: http://vimeo.com/4351066.

Por otra parte, la distribuidora Aurum ha estrenado en los cines españoles el pasado viernes Ponyo en el acantilado. La nueva película del veterano director japonés Hayao Miyazaki fue un éxito de taquilla en el verano de 2008 en su país de origen, recibiendo los halagos de la crítica. Los aficionados a la música de cine han esperado expectantes el estreno de Ponyo en el acantilado, ya que la banda sonora original de este filme está compuesta por Joe Hisaishi, una de las estrellas de mayor relevancia invitadas al V Festival Internacional de Música de Cine ‘Ciudad de Úbeda’.

En la dirección http://www.play.com/Music/MP3-Download-Album/4-/8972637/Ponyo-on-the-Cliff-by-the-Sea/Product.html se puede disfrutar de parte de los treinta y seis temas compuestos por Hisaishi para esta banda sonora, algunos de los cuales se escuchará con seguridad en el concierto de los compositores que tendrá lugar en el marco de la V edición del festival ubetense y cuyo plazo de inscripción para los interesados como congresistas permanece abierto. Más información en el sitio web del Festival http://congreso.bsospirit.com/. También os adjunto un enlace al vídeo promocional realizado por la organización sobre la presencia estelar de Joe Hisaishi en Úbeda 2009: http://www.vimeo.com/4325392.

jueves, 23 de abril de 2009

Darth Vader quiere cobrar

Debe ser ingrato grabar con letras de oro en la historia del cine el nombre del personaje al que encarnas y quedarte en el anonimato al aparecer en pantalla ataviado con un traje que oculta tu rostro o tu físico. Uno de los más malvados del celuloide de todos los tiempos es Darth Vader, personaje tan oscuro como atrayente de la saga de La guerra de las galaxias y para mí casi el principal protagonista. Porque si Vader no llega a decir aquella frase de "Yo soy tu padre" en la mejor cinta de la saga (El imperio contraataca), George Lucas no hubiera podido continuar con su megalómeno folletín. La frase lanzada a Luke Skywalker por, teóricamente, David Prowse, ha quedado para los anales de la historia del Séptimo Arte.

¿Por qué apostillo lo de 'teóricamente'? Porque el actor que encarnó a Darth Vader, además de ser el claro ejemplo de intérprete que ha padecido lo que comenté al inicio, no escuchó nunca su voz en Star Wars, ya que George Lucas consideró que su tono no era lo suficientemente oscuro como para interpetar vocalmente el papel, así que lo sustituyó por James Earl Jones sin que le dijera nada a Prowse. Al menos así lo asegura el actor que, por aquellos años setenta, ya empezaba sus trifulcas con George Lucas. Y las broncas continúan treinta años después de que David Prowse se haya visto en pantalla con una voz ajena.

En estas semanas, Prowse ha manifestado que lleva años esperando que el director de la saga y su productora le abone los derechos que le asisten de taquilla por hacer el papel. La historia es sencilla: Ni Lucas ni Prowse (ni nadie) imaginó el dinero que Star Wars iba a dejar en taquilla y estrenaron el filme con unos contratos cerrados en los que Prowse figuraba con un modesto salario por su papel. Tras el éxito de la película y lo que ya todos sabemos, Prowse renegoció sus condiciones para rodar las secuelas en sucesivos años y solicitó un aumento que Lucas abonó en lo relacionado con la primera cinta de la saga, pero nunca llegó a pagar lo correspondiente a El imperio contraataca y El retorno del Jedi. De manera que David Prowse reclama ahora lo que considera es su justo salario.

Curioso que Lucas, al que precisamente no le debe faltar el dinero, no le haya abonado esta cantidad a Prowse, un actor que realmente no hizo más cosas destacables en el cine y que antes de enfundarse el traje de Darth Vader era deportista halterofílico y por ello fue básicamente seleccionado, dado su físico. No se puede decir que Prowse se ha dado a conocer por encarnar a Vader y que realmente es él quien le debe todo a Lucas, ya que nos basta con preguntar a los millones de espectadores cinematográficos quién hizo el papel de Darth Vader y apenas los más frikis de la saga nos lo van a contestar. El gran público sólo vio traje negro y máscara y en España escuchó la voz de Constantino Romero. Y de hecho, David Prowse fue conocido por sus campañas de concienciación educativa y cívica hacia los niños, por lo que fue condecorado por Gran Bretaña, adquirió su fama en el ámbito deportivo y tiene un prestigioso gimnasio, además de realizar campañas contra el cáncer. Las malas lenguas hablan de su difícil carácter e incluso que cobra a 30 euros los autógrafos y las fotos, pero parece que ese dinero lo destina a estas campañas. Eso no lo sabemos con certeza y yo tampoco porque no he conocido, al menos por ahora, a David Prowse, que además anunció hace apenas un mes que sufre cáncer de próstata.

Más le valdría a George Lucas -director sobrevalorado donde los haya y uno de los millonarios de Hollywood más podridos de billetes- pagarle a Prowse lo que le debe.

martes, 21 de abril de 2009

Último Estreno

Un amigo me ha vuelto a decir que echa de menos aquellas noches del programa Último Estreno en Radio La Isla y que desde su desaparición forzada, en junio de 2005, las madrugadas de los martes, jueves y los domingos de sólo bandas sonoras no son lo mismo. Que hay que solucionar ese vacío.

Cada vez que me han venido durante estos casi cuatro años a decirme o a escribirme lo que hoy expongo -decenas de antiguos oyentes y conocidos- siempre he tratado de esbozar una sonrisa no de suficiencia, sino de amabilidad y comprensión hacia una audiencia fiel que mantuvo Último Estreno desde 1989 a 2005, nada menos que 16 años. Durante los meses después de la desaparición del programa de la parrilla de RLI me resultaban tan dolorosas aquellas noches sin mi programa, obligado por las circunstancias de aquella emisora del todo insostenible -ahora es una pálida sombra de lo que llegó a ser hace años- que cuando alguien me preguntaba explicaba vehementemente los motivos de mi marcha: aquella humillante silicona en las teclas del teléfono para que no "se gastara dinero" haciendo entrevistas, el baile de controlistas cuando los había, la alarmante falta de medios, el desprecio a nuevas iniciativas,... entre otras variopintas y numerosas causas propias de cualquier esperpento propio de las películas del tándem Jim Abrahams-Jerry Zucker. Con el paso del tiempo, consideré que ya no merecía la pena ofuscarse explicando las razones de aquella marcha, no precisamente por los oyentes que venían a apoyarme, sino porque siempre hay que mirar hacia adelante y pensar en el futuro, olvidando cosas que, conforme más transcurre el tiempo, te percatas del primitivismo en el que estabas sumido por culpa de terceros. Pero el fantasma aparece estratégicamente, ya que muchos siguen preguntándome por este asunto, incluso gente del cine a nivel nacional con los que mantengo contactos y que pasaron por los micrófonos del programa, interesándose también por mis críticas escritas durante 18 años y cómo tampoco han sido valoradas por algunos asnos.

Hay mucho camino por recorrer en los próximos meses en diversos ámbitos, pero quizá los amantes del cine tengan una sorpresa preparada para el futuro por internet. En unos tiempos en los que los medios en manos de catetos van cayendo por razones obvias -el tiempo todo lo pone en su lugar-, se abren otras ventanas en formatos del futuro que nos proporcionan inimaginables posibilidades. Y si ahora estamos trabajando en una futura radio para el Festival Internacional de Música de Cine Ciudad de Úbeda -la que les ha caído nombrándome jefe de comunicación-, el abanico podremos abrirlo en poco meses.

Todo se andará. Incluso todo, y todos, terminan en el lugar que les corresponde.

domingo, 19 de abril de 2009

Anguita y la errónea simbología

El viernes me invitaron a la conferencia que ofreció Julio Anguita en la Facultad de Filosofía y Letras, dentro de los actos organizados por Izquierda Unida en una semana en la que en numerosas poblaciones españolas se ha analizado política y socialmente lo sucedido en la II República Española, que vio la luz el 14 de abril de 1931.

Anguita siempre ha sido un tipo interesante y, a pesar de mostrarse alarmantemente envejecido, sus palabras resultan dignas de mantener un debate político de altura de los que hoy día adolecen muchas de las discusiones entre líderes y cargos más jóvenes que él. En su día escribí en Arroz amargo sobre lo que Julio Anguita asevera respecto a la Monarquía y lo hice cuando José Antonio Barroso comenzó a bramar contra el rey Juan Carlos (http://arrozamargo.blogspot.com/2008/04/la-repblica-desprestigiada.html), algo nada nuevo bajo el sol cuando además muchas de las cosas que dice el alcalde de Puerto Real están escritas en libros que la Justicia ni el poder político secuestran ni sus autores son llamados al orden en la Audiencia Nacional. Debe ser cosa de que, como en este país no se lee, ya pueden incluir los libros los disparates o las incorrecciones políticas más insospechadas que da igual porque los libros no constituyen correa de transmisión para el ciudadano.

Casi trescientas personas asistieron a las dos horas y pico de Charla de Anguita, entre ellos republicanos de toda la vida, curiosos, estudiantes e ilustres docentes, como Alberto Ramos Santana, republicano convencido. A mí Anguita no me tiene que convencer de nada a estas alturas, y menos cuando insiste en afirmar que la República no consiste en darle un billete al monarca actual para mandarlo al exilio y cambiarlo por un presidente aun siendo elegido por las urnas. La República es mucho más que eso, asevera. Y lleva razón. Alcanzado un acuerdo en este sentido, lo que me parece un enorme error y una incongruencia es que el ex líder del PCE alerte sobre los "numerosos errores" sucedidos en la II República y la necesidad de no cometerlos en una tercera y sin embargo, sus colegas de formación reciban a los asistentes a la conferencia con una apabullante decoración de banderas tricolores e himnos trasnochados. En una sociedad a la que hay que llevar el mensaje prestándole una relevante importancia a las formas y la estética, no es comprensible que hablemos de República y lo hagamos relacionándola exclusivamente con la simbología de una II República a la que, precisamente, Anguita criticó con dureza, entre otros factores por la salida de madre de su anticlericalismo. Hubo una I República, de corta duración, en la que la bandera de España no era tricolor, y si los republicanos quieren calar en la sociedad española, debe abandonar simbología accesoria y que recuerdan tiempos convulsos. ¿Acaso no se puede ser republicano y defender la bandera roja y gualda con su escudo republicano como sucedió en la I República? Los izquierdistas de IU y el PCE están cometiendo una torpeza porque ahora es crucial llegar a la sociedad desprendidos de colores y canciones manidas, polémicas y manchadas de sangre, menos que la que se vertió por culpa del águila de San Juan y el lema 'una, grande y libre' pero rezumante de recelo y temor en los españoles. Si el propio Anguita habla de su 'nueva República' bien haría su formación en olvidar la simbología del periodo 1931-1936 porque hay mucho republicanismo y bueno más allá de una época en la que sus propios y carismáticos líderes admiten errores de bulto a la hora de defenderla. El pastel no sólo debe estar apetitoso, sino que su aspecto también debe invitar a hincarle el diente. Y esa asignatura parece que no quieren aprenderla en IU ni en el PCE.

jueves, 16 de abril de 2009

¿Errores de Hacienda?

Yo soy de letras y me siento muy orgulloso de no saber hacer una raíz cuadrada, que me parece algo aburridísimo. Ello no es óbice para que sienta cierto atractivo por cuadrar las cuentas de mi casa y hacer que dos más dos sean cinco en lugar de cuatro para llegar a fin de mes. Sumar las cantidades del coche, el garaje, la hipoteca, el móvil, internet, lo que hay en el frigorífico, la comida del gato y, por supuesto, los intereses filibusteros de los bancos, y compararlo con mis ingresos me produce risa floja, aunque ese primario ejercicio contable me gusta mucho. Debe ser que me va el cuero, el látigo y los pinchos.

No obstante, mis básicos conocimientos de sumas y restas no alcanzan como para ser un erudito a la hora de analizar tantas casillas en la Declaración de la Renta, ni a comprender cómo miles de ciudadanos que cobramos una porquería cada mes o estamos desempleados tenemos que pagar ahora trescientos, cuatrocientos o incluso mil quinientos euros. Soy tan básico que lo único que sé es que te llevas todo el puñetero 2008 currando por una humillante cantidad de dinero en una empresa de mierda y ahora te clavan. Será cosa de las deducciones, los gravámenes, las retribuciones dinerarias, el manguito o la trócola. Pero la realidad es así. Aunque puede que también sea debido a graves errores de Hacienda.

Hoy se ha descubierto que al menos 40.000 borradores remitidos a los contribuyentes contienen errores en las deducciones de vivienda. Se habla de declaraciones conjuntas, pero les adelanto que en próximas horas se descubrirán más fallos. Porque mi declaración es individual y...oh, qué curioso me resulta, aun sin saber de qué va tanto rollo de números: se han olvidado en mi borrador de mi vivienda y su carácter de "habitual", tal y como en años anteriores y como refleja en la fotografía el papelito de la parte inferior. Eso no lo he visto este año en mi borrador. Serán despistes del fisco. Y ya van dos en catorce días. Para pajas de Hacienda estamos...

Más información: http://www.cincodias.com/articulo/fiscalidad/Hacienda-detecta-nuevo-error-borradores-podria-afectar-40000-contribuyentes/20090416cdscdsfic_1/cdspor/

http://www.cope.es/economia/16-04-09--nuevo-error-hacienda-mas-un-millon-borradores-45073-1

martes, 14 de abril de 2009

Gracia gaditana versus burradas

Como nada ni nadie puede ser perfecto a excepción de la Macarena, el Señor de la Misericordia de San Fernando y el jamón serrano, la guasa gaditana también tiene su parte de desesperación. El cachondeo y la agudeza chistosa que lleva a gala legítimamente el gaditano nos sirve para desentumecernos de tanto panorama gris. Son señas de identidad trasladables en ocasiones a otras localizaciones andaluzas. Sólo así se entiende que hace un par de años me topara con un pilote de cemento en el suelo de cierta calle sevillana en plena Semana Santa y un chaval me dijera "ten cuidao, mi arma, que al suelo le ha salío un burto", lo que me hizo descojonarme y que me mandaran a callar delante del paso de palio de Los Estudiantes. En el caso de Cádiz, pues ya véis la fotografía de hoy. Siempre hay que ir presto a empuñar la cámara fotográfica o al menos utilizar el móvil para recoger cosas como la trasera de este ciclomotor, en la que su conductor no sólo nos invita a degustar cierta parte de su cuerpo, sino que nos lo ordena imperativamente. Me dan arcadas de imaginármelo, pero me parto de la risa con la ocurrencia de que le comamos su miembro viril al dueño de la moto, lo escriba además en el culo del vehículo y se quede tan pancho.

Todo esto tiene gracia. Otros lópez son las burradas que se escuchan cuando uno se viste de nazareno y lleva la cara oculta. El Jueves Santo no estaba yo como para permanecer pendiente del personal de la acera, pero alguna pillé. Como aquella individua hablando por teléfono que llegó a decir que "no sé qué paso es, pero estoy en la calle Ancha, vente pacá. Creo que es la Borriquita". Es decir, a las puertas de que a Cristo lo terminen de rematar, las túnicas negras, Jueves Santo y ella dice creer que mi paso lleva un pollino con alegres moscas vespertinas. Bien.

Veinticuatro horas después ya me relajo más. Anónimamente, en las filas del Santo Entierro con mi túnica de ruán y cirio a escasos metros de María Santísima del Mayor Dolor en Su Soledad, soporto como puedo a mocosos que piden cera hasta la desesperación...cuando los cirios están apagados por un jodido viento que me hizo pasar más frío que en la comunión del Yeti. Te das la vuelta hacia el centro de la calle en señal de recogimiento y penitencia personal y el niño te tira del antifaz, del fajín de esparto, de la manga, te da un pisotón y trata de apoderarse del cirio mientras berrea "¿Me da cera?". Me entra complejo de Pat Morita en Karate Kid con aquello de "Dar cera-pulir cera". Mientras tanto, los padres, felices por quitarse de su lado unos minutos a los niños coñazos, comen pipas de girasol y ríen, inconscientes de la relevancia de la jornada que en muchas otras poblaciones se vive con fervor y silencio en la vía pública. Queda tanto por aprender en San Fernando...

Pero vayamos al monstruario oral. Entre otras perlas sufridas en estas jornadas sacras, la frase del Viernes Santo fue la mejor de la Semana Santa. Les juro por Edison que es real. En una de las paradas en plena calle Real, me toca al lado un grupo cuyo cabeza de familia -de no más de 40 años y no menos de 35- sentencia con una máxima pontifical: "Míralos, si es que no pueden encender las velas. Digo yo que, con los adelantos que hay, ¿qué trabajo les costará ponerle una batería al cirio? Le pone una pila dentro y una bombilla arriba y ya está, los penitentes y la procesión iluminá, seguro que les iba hasta a costar menos trabajo y dinero...". Y se quedó tan pancho y orgulloso ante el asentimiento de su prole. País, que diría Forges...

viernes, 3 de abril de 2009

Mis Viernes de Dolores

Hoy es Viernes de Dolores. La liturgia relegó esta jornada en favor de la de septiembre para evitar duplicidad en la conmemoración. Pero los cofrades la mantienen como si fuera un derecho consuetudinario. Y como recordar los dolores de María una vez al año nos parece poco, y como su puñal atravesándole el corazón es doble en nuestro calendario, por dos veces aliviamos su dolor con flores, cera e incienso. De manera que la jornada de este tres de abril se convierten en las veinticuatro horas más marianas de cada año tras el 8 de diciembre.

Recuerdo que mi padre me inculcó la costumbre de visitar Sevilla cada Viernes de Dolores. Con apenas ocho años aguardaba impaciente este día para subirme al coche y emprender carretera hasta una ciudad que te recibe con una rabiosa mescolanza de fragancias y sentidos. La luz es más luz hoy en Sevilla, el trasiego de los templos es distinto incluso al de los próximos días y algunos aprendices de cofrades son más impacientes que aquel niño que fui. Por eso ya hay procesiones de pequeños por los barrios, y sus mayores preparan los pasos de varias hermandades que adelantan a mañana la presencia de la cruz de guía en las calles hispalenses.

Yo compraba velas y una bolsita de incienso con mi dinero ahorrado frente a la iglesia de El Salvador. La cera para dos pequeñas imágenes con las que recorría el barrio isleño de la Pastora nada menos que tres tardes de la Semana Santa junto con la chiquillería de aquellas calles y mis amigos de infancia. De infancia y de ahora en muchos casos, porque las hermandades sirven para muchas cosas y entre ellas para construir nexos fraternales indelebles. Con el incienso trataba de hacer parecer aún más aquellos infantiles cortejos a las procesiones que horas después veía en la calle, cuando los dos pasos los recogíamos hasta el patio de casa de mi abuela y nos apresurábamos para ir a la ducha y no perdernos ni un penitente, ni una insignia, ni un cargador, ni una marcha,...

Fueron muchos años de Viernes de Dolores en Sevilla. Después lo prolongué hasta el fin de semana y aquel ritual lo continué con amigos, novias, chicas inconfesables a las que les explicaba en cada templo cómo se borda un palio, el repujado de un varal y, sentados en un banco de San Lorenzo, cómo el Gran Poder quiso refugiarse una noche en la casapuerta de un despechado. Y ellas escuchaban y dirigían sus ojos ante aquellas desconocidas imágenes, absorbidas por lo recién descubierto.

El trabajo impidió que continuara la tradición del Viernes de Dolores y la trasladé a otros días de la Semana Mayor. En ocasiones voy el primer fin de semana, otras el Sábado Santo y Domingo de Resurrección, siempre el Martes Santo para ver mi hermandad de San Benito,... y la ineludible visita a San Gil. Allí espera Ella, con una insultante y paradójica soberbia, como una mujer que no entiende de la humildad y el sufrimiento que promulgó Su Divino Hijo... Ella está imponente, nada más entrar te apabulla, te invita a sentarte para musitar una oración entre miles y miles atendidas durante estos días. Siempre la Esperanza Macarena...

Mañana marcho para Sevilla y regreso el Domingo por la noche para vivir también intensamente la Semana Santa de San Fernando. Comienza el remolino de sentimientos, la locura de la fe y el corazón. "Tos por iguá, valiente. A esta é".

jueves, 2 de abril de 2009

Maurice Jarre

Su muerte no podía pasar por alto para los amantes de la música cinematográfica. Confieso que lo tengo en la lista de los grandes, aunque a distancia de Bernard Herrmann o Miklos Rozsa. Es cuestión de gustos pero también de calidad. Y eso que Maurice Jarre hizo Jesús de Nazaret ya bien entrados en la década de los setenta al más puro estilo del Sodoma y Gomorra de Rozsa por citar alguna, pero en aquellos años resultaba ya anacrónica esta música para los dudosos pero legítimos gustos de la época.

Maurice Jarre falleció el pasado fin de semana a los 84 años de edad. Sus composiciones para grandes películas como Lawrence de Arabia o Doctor Zhivago no le van a la zaga, con anecdotario incluido. De hecho, no sólo es universalmente conocido el tema de Lara, sino que todos tarareamos las notas de la melodía utilizada hasta hace escasos años en el anuncio televisivo de la Lotería de Navidad. Como casi siempre, muchos creyeron que era original para el spot, pero ese corto y bellísimo tema lo compuso Maurice Jarre para Doctor Zhivago en los sesenta y no lo utilizó en la película. Se llama 'Interior Student Cafe' y sólo dura 1:34 minutos. Así se especifica en una edición del score extraordinariamente editado en 1995 en la colección de clásicos de Turner para celebrar el 35 aniversario del filme. Una joya que me costó un dinerito y que diez años después vi varios ejemplares de ella arrumbadas en una cesta de esas que colocan las grandes superficies con centenares de compactos a precios de oferta. Estaba a ocho euros. Si aún lo veis por esos montones de saldo aparentemente sin interés pero repletos de maravillas a poco que escudriñéis, no dudéis en comprarlo. Cuarenta y cinco temas compuestos para el filme, incluso los no utilizados finalmente por David Lean, y un libreto de 28 páginas con fotos, historial del rodaje y reflexiones de Jarre sobre su partitura. Ahora lo estoy escuchando de fondo y ya tengo los vellos como escarpias...

Maurice Jarre fue un tipo grande y curioso. En los años ochenta hizo un giro en su carrera, no sé si auspiciado por la influencia de su hijo Jean Michel Jarre, y compuso interesantes bandas sonoras con instrumentos electrónicos y rechazando la orquesta en su mayor parte. Dos de las más destacadas fueron Único testigo -la mejor película del australiano Peter Weir- y La costa de los mosquitos. Corta pero intensa. Pero también conjugó todo ello con regresos extraordinarios al romanticismo de las cuerdas. A él se debe la partitura de uno de los éxitos del cine de todos los tiempos en taquilla y también en calidad (cómo llora Demi Moore): Ghost, delicada partitura a la que siempre le vi ramalazos del tema principal de la serie Galáctica, estrella de combate, compuesto por Stu Phillips. Si quereis comprobarlo, teneis estos enlaces. En el caso de Galáctica, oid el tema principal. En el de Ghost, pinchad en el tema 6, el de Molly...

http://www.amazon.com/gp/recsradio/radio/B0000TAZVA/ref=pd_krex_dp_001_001?ie=UTF8&track=001&disc=001

http://www.amazon.com/gp/recsradio/radio/B0000015KG/ref=pd_krex_listen_dp_img?ie=UTF8&refTagSuffix=dp_img

Lo de Ghost también fue un ejemplo de ignorancia general por dos razones. La primera, porque una buen parte de los millones de espectadores que fueron a verla salieron del cine alabando más la canción Unchained Melody que los temas de Jarre. La segunda, porque pocos sabían que esa misma canción en realidad no era del grupo que la cantaba y lo elevó a los altares no sólo como si The Righteous Brothers fueran sus intérpretes, sino sus compositores. Y el autor de la preciosa canción era Alex North, otro grande de la música cinematográfica que escribió las partituras de Espartaco, el preludio de El tormento y el éxtasis o el 'score' rechazado para 2001 una odisea del espacio.

En el caso de Jarre, sus Lawrence de Arabia, Doctor Zhivago y Pasaje a la India le reportaron los tres Oscar que ganó a lo largo de su prestigiosa carrera. Este último de manera injusta a mi juicio, porque entre las cinco finalistas estaban obras mejores como Indiana Jones y el templo maldito de John Williams, El mejor de Randy Newman o el propio Alex North con Bajo el volcán, una auténtica joya. Pero el Oscar fue para Jarre. Con la perspectiva del tiempo, y escuchando sus obras mientras trabajo,... qué más da. Otro grande que se nos va cuando además la música de cine, y el séptimo arte en general, es sinónimo actualmente de pobreza creativa.