lunes, 15 de septiembre de 2008

Richard Wright: la foto ya imposible

La imagen del Live 8 fue la de ellos juntos. Grandes monstruos de la música se subieron a los escenarios repartidos por el mundo para esta causa benéfica, pero la foto del acontecimiento del verano de 2005 fue la de Roger Waters, David Gilmour, Nick Mason y Richard Wright abrazados saludando a miles de aficionados en el lugar y millones de ellos frente al televisor. Tras casi cuarenta años juntos y composiciones ya universalmente conocidas, la participación del grupo en Live 8 hizo multiplicar por diez las ventas de sus discos durante las semanas posteriores al evento. No les hacía falta, pero ello daba muestras de la inmortalidad de Pink Floyd.

Dolorosa paradoja. Hablo de un grupo inmortal en la noche en la que me llega la noticia de la muerte de su teclista, Rick Wright. Un cáncer ha acabado con su vida. Maldita sea. Los ilusos que sabemos que las desavenencias personales, los encontronazos e incluso los intereses económicos pueden en ocasiones superarse para dar paso a un sueño -lo vivimos en el verano de 2005-, ya no podemos suspirar por ver lo que el resto de nuestra vida ha sido una aspiración frustrada. Y no han sido los enfados ni los royalties. Ha sido el cáncer el que nos impide seguir soñando con la posibilidad de que los cuatro miembros de Pink Floyd vuelvan a un escenario juntos.

Ya es imposible. Ya no hay nada que hacer. Ya no habrá más fotos después de la de 2005. Lo que era sumamente complicado pero convertido en una luz que brilla distante, un 'Shine on Your Crazy Diamond', se ha apagado. Junto con Rick, se murió la luz de cualquier posibilidad de unidad del grupo.

Sus teclados, su voz en alguna de las canciones del The Dark Side of the Moon con su participación en la composición, sus escasas ganas de litigios (abandonó el grupo el primero, incluso antes del último album juntos, The Final Cut) y su gran amistad con David Gilmour, al que ha acompañado en su gira en solitario On a Island desde el año 2006, han sido algunas de las circunstancias que han hecho grande al teclista de Pink Floyd. Aportó al grupo mucho más de lo algunos creen. El libro de Nick Mason, Dentro de Pink Floyd, editado por 'Ma non troppo', es un buen elemento para conocer los entresijos del grupo y el papel de Wright.

Qué tristeza me invade. Disfruté con Roger Waters y su concierto en Atarfe, y allí rubriqué mi firme compromiso de que, si alguna vez volviera a unirse Pink Floyd, acudiría a su concierto aunque se celebrara en el centro de la tierra. El cáncer ha hecho añicos mi promesa.

Las palabras más sentidas de David Gilmour nada más conocer la muerte de su compañero y amigo se pueden leer en la web oficial del líder de Pink Floyd tras la marcha de Waters: http://www.davidgilmour.com/.

Aviones en Cádiz

Francamente, no sé qué opinar con respecto al espectáculo de exhibición aérea celebrado este fin de semana en las playas de la capital gaditana. Teóricamente podría apuntarme a las congratulaciones ciudadanas (que son mayoritarias frente a las críticas) hacia quienes han sido los auspiciadores de esta iniciativa. Se habla de 230.000 personas concentradas en distintos puntos del término capitalino para presenciar las piruetas de los aviones, lo que significa casi el doble de la población que tiene Cádiz actualmente. Desde ese punto de vista, impecable. ¿Habrá conseguido el andalucista Manuel de Bernardo reunir 230.000 almas en San Fernando este fin de semana con sus coches tuneados? La rapidez por conocer la respuesta me deja sin dormir...

Admito la espectacularidad de los harrier y el resto de tipos de aeronaves haciendo piruetas, cabriolas sobre las nubes y todas esas cosas que impresionan, además de mantener el corazón en un puño viendo la innecesariedad de que un piloto queme el queroseno del aparato y caiga en picado hacia el mar y, en el momento oportuno, regrese hacia el cielo ante el aplauso del personal. Particularmente no me atrae lo más mínimo. Qué le vamos a hacer, sobre gustos ya saben. Pero me alegro de que tantas miles de personas disfrutaran del espectáculo. Distinto es mi criterio sobre esas sorprendentes excursiones o visitas que organizan los destacamentos militares con centros educativos o jornadas de puertas abiertas en las que niños de nueve, diez, once años se hartan de dar vueltas por el interior de los tanques, colocados como si fueran inofensivos, se fotografían con metralletas y lanzagranadas al lado de un maromo vestido de verde de 1,90 de estatura o conocen de primera mano una granada. Yo jamás llevaría a mi hijo a esas cosas, la verdad, y menos aún lo fotografiaría portando un m-16 al más puro estilo de Stallone en la cartelera de Rambo. Desconozco porqué los gobiernos no prohíben esas cosas. Ah, sí, que hay que meter gente en el ejército. Ya...

Lo de los aviones de este fin de semana no es lo mismo que lo de los tanques, por mucho que no queramos ver que la mayoría de esos aparatos que surcan el aire sirven también para matar. O para defendernos, que podemos decir eufemísticamente. No obstante, insisto, me alegro del deleite de los asistentes. Como también me satisface que algunos, muchos, aporten su diferente punto de vista sobre estas cosas, porque al final todos tenemos una parte de razón. Basta entrar en los comentarios plasmados en internet para leer a los que opinan sobre el innecesario gasto de combustible (durante cuatro días, no lo olviden) en tiempos de crisis, la contaminación acústica o los que, simple y llanamente, les aterra el virulento perfil de un avión de combate, sin necesidad de aportar explicación alguna.

En realidad creo que era más atractivo, al menos para mí, el concierto que el compositor español Roque Baños ofreció en el Teatro de Córdoba el sábado por la noche, dirigiendo con su batuta a la orquesta de la ciudad califal interpretando bandas sonoras como Alatriste, Los crímenes de Oxford, No somos nadie o La comunidad. Lástima que no pudiera yo asistir, aunque por una razón más que justificada: se casaban mis amigos José Vilches y May Romero. Qué buen ratito. Para aviones estábamos el domingo, vamos...

jueves, 11 de septiembre de 2008

La Asociación Andaluza Memoria Histórica y Justicia remitió ayer miércoles al juez Baltasar Garzón un detallado listado con los nombres de más de 22.000 desaparecidos en Andalucía, Extremadura y el norte de África durante la Guerra Civil, de los que un total de 1.524 corresponden a personas asesinadas en la provincia de Cádiz. El envío de estos nombres, que ascienden exactamente a 22.252 represaliados, tiene como objetivo facilitar su labor al magistrado de la Audiencia Nacional, dentro de las investigaciones que ha comenzado a llevar a cabo para saber exactamente qué sucedió con aquellas personas que sufrieron las decisiones del régimen dictatorial franquista o los desmanes acaecidos durante los años de la contienda civil.

La AMHJA, representada en sus dirigentes Rafael López y Francisca Maqueda, así como el abogado Luis Ocaña y el coordinador de la página web http://www.todoslosnombres.org/, Cecilio Gordillo, ofrecieron una rueda de prensa el martes para adelantar la presentación ante el juez de estos nombres, distribuidos en tres tomos que recogen los frutos de una labor de recolección de datos emprendida hace varios años por los recuperadores de la memoria histórica, y en los que están estampados 22.252 nombres de los 36.298 que constan en la citada página web, abierta para que, de manera interactiva, cualquier ciudadano pueda aportar datos sobre el paradero de familiares o allegados desaparecidos o consulte los nombres en cuestión. En esta web tiene mucho que ver además el sindicato CGT, que junto con la AMHJA, está personada en las denuncias sobre los desaparecidos en la Guerra Civil, entre ellas las presentadas el 18 de julio de 2007 entre las que, como ya informara este periódico la pasada semana, se encontraba la de una conocida represaliada gaditana, María Silva Cruz, La libertaria.

Las tareas de recuperación de nombres de represaliados es ardua y, de hecho, los miembros de la AMHJA aseguraron este martes que la cifra de muertos remitida a Garzón ayer puede significar “no más del 30 por ciento de las víctimas que hubo en los territorios” de los que se poseen datos. Las investigaciones llevadas a cabo hasta el momento cifran en más de 3.500 los nombres de gaditanos desaparecidos durante la contienda o a su finalización, bien en fosas comunes, fusilados a pie de carreteras, en la Sierra o en la Campiña, y hasta el momento están localizado los 1.524 remitidos al magistrado de la Audiencia Nacional, lo que supone el 10,78 por ciento del total. En provincias como Granada, el número de desaparecidos podría alcanzar los siete mil y sólo se han podido documentar una treintena de ellos. En total, son 14.137 andaluces los que conforman el listado de 22.252 desaparecidos que ya tiene en su poder el juez madrileño, pero los expertos cifran en más de 48.000 las víctimas que, teóricamente, deberían ser identificadas. Por otra parte, la AMHJA remitirá próximamente el mapa de las fosas comunes que han realizado las entidades para la recuperación de la memoria histórica financiado por la Junta de Andalucía, donde se identificaron 116 gaditanos en el caso de la provincia, 168 referidos a enclaves de Sevilla y 118 en la provincia de Huelva.

Por cierto, extraordinario el artículo de Enrique Montiel, Los huesos de Grazalema, publicado hoy en Diario de Cádiz, en relación a la noticia que escribí en el periódico Información hace varias semanas sobre la fosa grazalemeña de las mujeres...

martes, 9 de septiembre de 2008

Queda una más: ahora, concentración anganga

Que no, que el Floridance (que como hemos visto en las últimas horas en los periódicos - http://www.publicacionesdelsur.net/diarios/cadiz/sfdo/act_local/10diarios.htm era más escandaloso de lo que comentamos en un principio) no ha resultado ser el colofón del veranito isleño preparado por Manuel María de Bernardo y sus adláteres andalucistas y populares. Nos tiene reservados otros fastos para el fin de semana.

Desconozco si los vecinos de la Magdalena, cansados de sufrir numerosos inconvenientes apenas solventados durante estos años, saben lo que se les viene encima. Si lo del Cerro de los Mártires del pasado fin de semana sirvió para congregar a la flor y nata de los quinquis de la provincia y alrededores, ahora nos toca acoger al angangismo de Cádiz y más allá de nuestras fronteras.

Sumamos eventos prestigiosos y que dejan mucha pasta en esta ciudad por días que pasan. Por los cojones. El Ayuntamiento de San Fernando apoya ahora a una concentración de coches, camiones y no sé qué puñetas tuneados...a partir de las nueve de la noche en un recinto situado a apenas treinta metros de varios centenares de vecinos. No contentos con el Floridance, ahora se trata de apoyar otro acto, eso sí, muy propio para seguir construyendo La Isla que vemos últimamente: la de los angangos con coches tuneados, ciclomotores con carburadores robados de motos de cuatro tiempos, embrutecimiento de caras y mucho alcohol.

Prepárense para una nueva polémica. El que avisa no es traidor, es avisador. Me pregunto si lo del tuning de este fin de semana será el colofón o si el Gobierno de De Bernardo nos tiene otro cutrerío preparado a la altura de la preparación de nuestros mandatarios.

lunes, 8 de septiembre de 2008

Dudoso colofón al verano

Una amiga me pregunta si he tenido conocimiento de "una macrofiesta pastillera" (sic) que se había celebrado el sábado por la noche en el Cerro de los Mártires de San Fernando. Ni puñetera idea. No quería recabar mi atención al tema porque yo suela acudir a este tipo de eventos, no vayan a confundirse, sino por el interés informativo que pudiera tener y porque le había llegado las quejas de los vecinos de aquella zona del extrarradio de La Isla.

Hoy veo en los periódicos de lo que se trata. Dudoso colofón al catálogo de espectáculos veraniegos de los que ha participado el Ayuntamiento de San Fernando, bien por iniciativa propia o colaborando. Lo que se celebró en el Cerro de los Mártires fue una cosa llamada Floridance. Bajo este aparentemente cursi título se esconde algo que el propio Ayuntamiento de Jerez estaba loco por soltar el pasado año y que no es más que una macroconcentración de jóvenes amigos en su mayoría del consumo desmesurado de drogas que, eufemísticamente y como los organizadores destacan en su web (hoy cualquiera tiene web, bien para vender una moto falsa o para rezumar inquina), se organiza como ejemplo de "cultura alternativa". Que convenzan a los vecinos de que aquello era "cultura alternativa". Dieciséis horas de botellas rodando, drogas por doquier, ¿música? a todo volumen de grupos tan conocidos como los que ven en el cartel y otras, meadas como afluyentes de ríos entre los recovecos de las aceras, broncas y los hosteleros de San Fernando hoy marchando al Ayuntamiento para protestarle al equipo de Gobierno PA-PP. Lo dicho, orgásmico colofón a los eventos estivales de La Isla. Todos los conciertos de verano concitaron a la ridícula cantidad de 16.000 personas, según el propio Consistorio, es decir, ni una cuarta parte de los asistentes que en un solo espectáculo logró reunir el Ayuntamiento de Cádiz cuando el concierto de Operación Triunfo congregó a 80.000 almas a principios de agosto. Pero ellos dicen estar contentos. Es maravilloso ver cómo se han cargado eventos organizados en programas como Las noches del Castillo para traer a Los Brincos por poner un ejemplo, incentivar fiestas pastilleras y convertir San Fernando en la localidad más muerta en verano de toda la provincia gaditana durante las noches de julio y agosto. En Vejer hay más movimiento nocturno (económico, no de piojosos incordiando a los vecinos) que en La Isla. En Chiclana para qué les voy a contar. En Cádiz ya ni les digo. Tienen un paseo marítimo, claro. Como aquel que lleva el Ayuntamiento isleño anunciando desde hace quince años en Camposoto, con camping de primera, hotelito, puerto,... Lo único bien hecho allí han sido los senderos y por la Junta de Andalucía. Aquella playa se ha quedado para los coches de parejas que follan y plantan preservativos donde horas después aparcan los madrileños a disfrutar de la playa isleña y a sus hijos, al bajarse del coche, se les queda pegados los condones a los zapatos. No me llamen escatológico ni puerco, es la mísera realidad.

Mis felicitaciones. Lo dicho, gran culmen a la política estival lo de Floridance. A la 'altura'. Y hablando de todo un poco, cuando le dé la gana al Ayuntamiento, me ilumina la calle Arenal, principal arteria de tráfico ahora tras cortar la calle Real por mor de las obras del tranvía, que es una verguenza de noche cómo tienen aquello. Y me pintan las señalizaciones horizontales de tráfico en las calles. ¿Que no lo sabían? Tranquilos, le subo algunas fotos en estos días. Y me ponen contenedores de basura en la Casería, que para eso me cobran bien una más que tasa. ¿Me pueden iluminar la calle Germán Caos, please; desratizar aquello? ¿Les suena Fadricas II o fue que lo soñé cuando escribí hace once años de aquella iniciativa? ¿Han pensado dar una vueltecita por el barrio de La Pastora, el más pringoso y maloliente de La Isla por la dejadez municipal en todos los aspectos? ¿Le han preguntado a los vecinos por la plaza del Merendero, donde antaño proyecté películas de cine con los vecinos y se las presenté rodeado de parterres cuajados de rosas, enredaderas, flores de jarro, y ahora todas las noches llega la policía a dar palos porque se vende droga por kilos? ¿Han visto el enlosado de las calles Cádiz, Cartagena, Las Salinas...? ¿Han andado últimamente por el Paseo Joly Velasco, o es que aquello es de los militares y que sean ellos los que coloquen bancos, arreglen la vegetación y expulsen a los indigentes de allí, sentaditos con sus cartones de Cumbres de Gredos delante de seis establecimientos que pagan sus impuestos a usted y no a la Armada?

Son sólo algunas preguntas, otro día seguimos. O quizá no lo interese. Como viene el príncipe Felipe a los fastos del 24 de septiembre, ya está todo solucionado. Ah, y además, hay una procesión magna en 2010. País, que díría Forges...

viernes, 5 de septiembre de 2008

La necesaria valentía de Dorado Soto

Me han llamado poderosamente la atención las lacónicas y diáfanas palabras del obispo de Málaga, Antonio Dorado Soto, sobre la acuciante crisis que padecemos (desaceleración económica eufemísticamente hablando) y sus causas. El que fuera principal pastor de la iglesia gaditana y ahora de la diócesis malagueña no habla de números intangibles a la hora de reflexionar sobre cuál es el origen del quebranto que padece el bolsillo del ciudadano, ni siquiera ahonda en motivos de "política internacional" (otro eufemismo para no decir claramente que lo de Irak, junto con otras perlas decididas por los tres aprendices de repartidores del mundo hace algunos años, han jodido la economía europea), sino que se acerca en su discurso a lo más real con lo que conviven los españoles, creyentes o no.

Por eso, al hablar de las causas de este estropicio económico, el obispo las dice bien clarito. Don Antonio mete los dedos en la llaga y me alegra profundamente ante una curia eclesiástica generalmente indolente con las sangrías que la sociedad padece. A los curas, tanto a los obispales como a los de pueblo, les interesa más mantener entretenidos a miles de descerebrados sacando procesiones conmemorativas y aficionados a las cofradías empozoñando el ambiente por rencores que unirnos a todos para dar el paso adelante y ponernos del lado de los que sufren, que son muchos y cada vez más a tenor de lo que está aconteciendo, y dar un tirón de orejas a tanto desmadre capillístico. Claro que eso puede acabar con 'la afición' no sólo a las procesiones, sino a la propia Iglesia. Y...¿quién va a pisar los templos entonces?

Por eso me parece muy positiva la actitud del obispo de Málaga, de la que deberíamos aprender los cristianos por dos motivos. El principal, su valentía y la exposición de su denuncia sin temores. El segundo, porque es un golpe de prestigio para una devaluada Iglesia, cada vez más proclive a permitir el boato pueril en la calle que concienciar a sus integrantes de que debemos arrimar el hombro ante tanta injusticia social.

Monseñor Dorado Soto denuncia que la realidad de la economía es actualmente muy escandalosa e indica que se están "destruyendo empresas y puestos de trabajo a un ritmo preocupante. Lo de menos es el nombre que demos a esta situación", ya que en opinión del responsable de la diócesis malagueña, "lo verdaderamente grave y doloroso" es que muchas personas y familias no pueden afrontar sus hipotecas o tienen dificultades para llegar a final de mes, en el caso de que “no hayan ido a engrosar las listas del paro”.

Para el obispo es el momento de dar la talla como gobernantes rigurosos, y de ver una clase política responsable y de unos sindicalistas serios", sin tener que esperar a que lleguen "tiempos de bonanza". También da un repaso a aquellos "afortunados", que tienen trabajo y vacaciones y que hablan del síndrome posvacacional, ya que numerosas personas carecen de un puesto laboral.

El obispo malagueño también arremete en su pastoral con lo beneficios de la empresas. Dorado considera "escandaloso" constatar los beneficios de algunas empresas importantes y "los sueldos que se estilan entre los altos cargos, incluso de la política".

En opinión de la autoridad eclesiástica, el carecer de un puesto de trabajo también tiene sus repercusiones en el ámbito familiar ya que repercute negativamente sobre ésta. Para el obispo el paro, no es ajeno “a los recientes accidentes laborales registrados con víctimas mortales".

miércoles, 3 de septiembre de 2008

Las fosas ciegas

Ver Los girasoles ciegos anoche me sirvió para terminar el día consternado del todo. Durante horas me llevé trabajando en el tema que he publicado hoy en el periódico Información sobre el auto del juez Baltasar Garzón y las denuncias presentadas por los familiares de los desaparecidos durante la Guerra Civil, especialmente el caso de María Silva Cruz, conocida en la Sierra gaditana como La Libertaria. Fue el 18 de julio de 2007 cuando su propio hijo, Juan Pérez Silva, presentó la denuncia en la Audiencia Nacional. Tenía quince meses y estaba en brazos de su madre cuando a ésta la detuvieron, la 'pasearon' por diferentes cárceles y una noche la trasladaron a un ignoto lugar para meterle una bala en la cabeza, como hicieron instantes antes con otra mujer y un hombre acusados de ser rojos.

A Juan le mataron también a su padre en la guerra. Es lógico que, a pesar del paso del tiempo, quiera resarcir la memoria de sus progenitores, vejados y convertidos en anónimos despojos 'verbi gratia' de la locura fascista, empujados a unas fosas tan ciegas como los girasoles metafóricos de la película de José Luis Cuerda.

El día anterior, el martes, me sentí especialmente atraído por la historia de las quince mujeres que también fueron detenidas y humilladas por las calles de Grazalema antes de que las fusilaran y sus cuerpos lanzados al vacío, preludio de la tierra teñida de sangre trabajadora. En la localidad grazalemeña se han iniciado los trámites para exhumar la fosa donde se encuentran los restos de esas mujeres cuyos pecados fueron ser republicanas, mostrar su desprecio a la dictadura o, simplemente, estar ahí en el momento más inoportuno.

La documentación que tengo al respecto (teléfonos, apuntes, conocidos, libros,...) me apasiona y quiero acudir a las jornadas que en octubre se celebrarán en Grazalema sobre las exhumaciones de fosas comunes, que reunirá a expertos en derecho, medicina e historia los días 17 y 18, con visita incluida tras la conferencias a la zona de Los Alamillos, donde se encuentra la llamada Fosa de las mujeres.

Tengo unos días adecuados para digerir, analizar y reflexionar sobre Los girasoles ciegos, esa película académicamente perfecta, pulcrísimamente rodada, con una Maribel Verdú grandiosa y la extraordinaria música de Lucio Godoy. Lástima, tanto academicismo le aporta una frialdad que nos hace mantener una cierta distancia con lo que sucede en pantalla. Pero merece la pena pensar en la versión franquista del doctor Jeckyll y Mister Hyde que es el diácono Salvador, esa dualidad sumamente interesante entre el militar imperturbable y el aspirante a sacerdote tentado y titubeante.