El debate entre Zapatero y Rajoy de anoche perdió alrededor de un millón de espectadores. Supongo que algunos estaban en la ceremonia de entrega de los Fotogramas de Plata, que se ha convertido desde hace años en un acontecimiento cultural de alcurnia en España. Pero eso son unos quinientos culturetas del mundo del cine, así que me siguen faltando 999.500 televidentes perdidos por el camino de estos siete días.
Otros optarían por el cine, varios miles; algunos estábamos planificando salidas procesionales para la próxima Semana Santa (de hecho vi el debate grabado de madrugada), pero creo que chalados a la una de la madrugada hablando de hermandades un lunes sólo somos un puñado. Así que continúo sin conocer dónde está el resto, por lo que extraigo la conclusión de que se aburrieron tanto en aquel combate -más encorsetado y falso que uno de Pressing Catch- celebrado hace siete días que decidieron mejor acostarse y pasar de tanta desnaturalización de lo que en realidad debe convertirse un debate político televisado de nivel.
Y es que, aunque queramos aparentar que tenemos una democracia adulta, existen ciertos ingredientes que aún balbucean como un bebé porque no hemos sido capaces de hacerlos madurar. No es lógico que en una democracia que ya cuenta con más de tres décadas de existencia, no se produzcan los debates televisados con mayor asiduidad, contando además con todos los candidatos de relevancia, no sólo con dos, (que se lo digan a IU), y con una mayor distensión y un enmarujamiento de los participantes, que realmente cuando hay que crispar un poco es ahora, no durante los cuatro años de legislatura, tiempo en el que hay que gobernar o hacer oposición, no joder la marrana con el consiguiente daño al país...
Eso sí, a mí al menos el debate me ha servido para algo. He sabido que existe una Academia de Ciencias de la Televisión, y desde hace tiempo. Anda, y es ahora cuando nos enteramos, porque no he visto en mi puñetera vida ni una noticia en la que haya salido a la palestra esta organización, y eso que yo como y pago mi hipoteca de escribir información. Es la misma academia que ha callado cuando la televisión basura ha sobrepasado los límites del respeto, cuando los créditos de las películas los cortan todas las cadenas, ni siquiera las públicas lo respetan, algo por lo que Federico Fellini denunció a la RAI italiana y le ganó el juicio; la misma academia que permite contraprogramación, que admite anuncios de productos timadores de noche que adelgazan o me ponen el pene más erecto; la misma academia que se vende a los intereses del fútbol,... Pues mire usted qué bien, que aparece ahora para apuntarse el tanto de los muermodebates de ZP y Rajoy. Con tu pan te los comas, academia.
En el diario El País aparece una encuesta en internet en la que se puede votar por el candidato que el lector internauta crea que ha ganado el asalto de anoche. Son miles los que hasta el mediodía de hoy han participado, dando como resultado que el 64% de ellos creen que ha sido el actual presidente del Gobierno el vencedor, ante un 35% que ha optado por Rajoy. El País es sospechoso, de acuerdo, aunque el sondeo sea entre los propios internautas y no una consultoría. En este caso podemos irnos a El Mundo. A Pedrojota le ha hecho un trabajito Sigma Dos (este no es por votos de lectores virtuales), de manera que el 49% de los consultados opinan que el debate lo ha ganado Zapatero y el 40% el líder de la oposición.
Mal veo a Rajoy a tenor de estos guarismos. Por cierto, retrotrayéndonos a mi exposición de la pasada semana, la eliminatoria ha quedado empatada: ZP 1, Rajoy 1. Ahora les toca a ustedes desempatar este domingo. Con todas sus fuerzas... ;-)
(Foto: El Mundo)
martes, 4 de marzo de 2008
viernes, 29 de febrero de 2008
Parecidos razonables (III)
jueves, 28 de febrero de 2008
Lo inexplicable de 'No es país para viejos'
Cualquier tiempo pasado fue mejor. Se entiende que en el cine. Aclarado esto, permítanme explicarlo.
A mí una película que en dos horas tiene únicamente de música una ranchera y además en una secuencia que parece extraída de un filme de Jerry Zucker o Jim Abrahams (reivindicaré Top Secret toda mi vida), no me inspira nada de confianza. No por ello tiene que ser espantosa, porque Siete días de mayo sólo contaba con siete minutos de banda sonora, eso sí, de Jerry Goldsmith. Pero los hermanos Cohen no son John Frankenheimer ni en No es país para viejos están Kirk Douglas, Ava Gardner o Burt Lancaster. De acuerdo, en lo de los Cohen allá va de un lado a otro del desierto Javier Bardem con su horrendo flequillo y maquillaje supino, no mejor que en su registro interpretativo de Boca a boca, y ahí la Academia de Hollywood aún desconocía quién era nuestro brillante actor.
El caso es que me alegro de veras del Oscar para Bardem, pero no entiendo esa devoción por el filme de los Cohen. No me explico cómo se puede defender una cinta en clara decadencia climática conforme transcurren los minutos hasta alcanzar el colmo de la degradación guionística cuando sus autores se cargan de un tirón a Josh Brolin-Bigote Arrocet, después de una hora haciéndonos creer que es una máquina igual o peor de evasión que el personaje de Bardem. Tampoco entiendo cómo se puede resolver un guión con ese tortazo de vehículos y esa reflexión de Tomy Lee Jones, al que estoy hasta la coronilla de verlo vestido de agente del orden con la misma cara desde hace ya años, con el culmen que supuso El fugitivo.
No concibo tantos planos secuencias enormemente largos en donde no suena nada, supongo que en un vanidoso intento de los Cohen por aproximarnos a la relidad. Pero a mí no me acercan a lo fidedigno, sino al tedio. La música apostilla los momentos tensos, de relax, los sentimientos de cada personaje, dinamiza la mente del espectador y le hace digerir mejor lo que presencia. Tan negativo es abusar de ella como no utilizarla. Y en No es país para viejos me falta y ello contribuye a aburrirme como una ostra.
Esta cosa nada original que han rodado los Cohen (hasta lejos incluso de otras obras menores reputadas por conseguir premios como Un plan sencillo o Babel) es algo medianamente susceptible de tener en cuenta si fuera una película de producción hondureña con actores desconocidos y ganadora en Sundance. Pero es un auténtico insulto que ocupe un lugar de honor en el libro de oro de los mejores premios del mundo del celuloide desde la noche del pasado domingo. En otros tiempos ganaba Eva al desnudo, incluso las menos buenas pero gratamente sustanciosas por sus milagros técnicos (montaje, banda sonora, fotografía,...) como Ben Hur, y si no nos marchamos tan lejos en el tiempo, La lista de Shindler o la inteligencia incluso de American Beauty. Pero ahora vence algo técnicamente mediocre, guionísticamente lamentable, pretenciosamente plúmbeo. ¿Que no hay más cera que la que arde? Que se lo digan a David Cronenberg, a su montador, a sus actores (grande Viggo Mortensen), a su músico, que aún se preguntarán por qué ha sido denostada su Promesas del Este.
A mí una película que en dos horas tiene únicamente de música una ranchera y además en una secuencia que parece extraída de un filme de Jerry Zucker o Jim Abrahams (reivindicaré Top Secret toda mi vida), no me inspira nada de confianza. No por ello tiene que ser espantosa, porque Siete días de mayo sólo contaba con siete minutos de banda sonora, eso sí, de Jerry Goldsmith. Pero los hermanos Cohen no son John Frankenheimer ni en No es país para viejos están Kirk Douglas, Ava Gardner o Burt Lancaster. De acuerdo, en lo de los Cohen allá va de un lado a otro del desierto Javier Bardem con su horrendo flequillo y maquillaje supino, no mejor que en su registro interpretativo de Boca a boca, y ahí la Academia de Hollywood aún desconocía quién era nuestro brillante actor.
El caso es que me alegro de veras del Oscar para Bardem, pero no entiendo esa devoción por el filme de los Cohen. No me explico cómo se puede defender una cinta en clara decadencia climática conforme transcurren los minutos hasta alcanzar el colmo de la degradación guionística cuando sus autores se cargan de un tirón a Josh Brolin-Bigote Arrocet, después de una hora haciéndonos creer que es una máquina igual o peor de evasión que el personaje de Bardem. Tampoco entiendo cómo se puede resolver un guión con ese tortazo de vehículos y esa reflexión de Tomy Lee Jones, al que estoy hasta la coronilla de verlo vestido de agente del orden con la misma cara desde hace ya años, con el culmen que supuso El fugitivo.
No concibo tantos planos secuencias enormemente largos en donde no suena nada, supongo que en un vanidoso intento de los Cohen por aproximarnos a la relidad. Pero a mí no me acercan a lo fidedigno, sino al tedio. La música apostilla los momentos tensos, de relax, los sentimientos de cada personaje, dinamiza la mente del espectador y le hace digerir mejor lo que presencia. Tan negativo es abusar de ella como no utilizarla. Y en No es país para viejos me falta y ello contribuye a aburrirme como una ostra.
Esta cosa nada original que han rodado los Cohen (hasta lejos incluso de otras obras menores reputadas por conseguir premios como Un plan sencillo o Babel) es algo medianamente susceptible de tener en cuenta si fuera una película de producción hondureña con actores desconocidos y ganadora en Sundance. Pero es un auténtico insulto que ocupe un lugar de honor en el libro de oro de los mejores premios del mundo del celuloide desde la noche del pasado domingo. En otros tiempos ganaba Eva al desnudo, incluso las menos buenas pero gratamente sustanciosas por sus milagros técnicos (montaje, banda sonora, fotografía,...) como Ben Hur, y si no nos marchamos tan lejos en el tiempo, La lista de Shindler o la inteligencia incluso de American Beauty. Pero ahora vence algo técnicamente mediocre, guionísticamente lamentable, pretenciosamente plúmbeo. ¿Que no hay más cera que la que arde? Que se lo digan a David Cronenberg, a su montador, a sus actores (grande Viggo Mortensen), a su músico, que aún se preguntarán por qué ha sido denostada su Promesas del Este.
martes, 26 de febrero de 2008
Rajoy 1-Zapatero 0
Miren que aquello comenzaba con buen pie para Rodríguez Zapatero. A pesar del dudoso gusto de quien le depiló las cejas entre otras decisiones cosméticas, el candidato del PSOE aparecía a la izquierda de la pantalla, a la derecha de Campo Vidal, de pie, erguido, perfectamente planchado. Al más puro estilo de un combate de púgiles en el que sólo faltaba que el presentador alzara los brazos de los protagonistas, Mariano Rajoy se situaba al otro lado, aunque algo torcido y con un garrafal error estético: su chaqueta estaba abierta y su corbata no parecía centrada por el efecto de una prenda que, algunos de sus asesores deberían recordarle, hay que mantenerla cerrada cuando estás de pie.
Puede parecer una nimiedad, pero en un debate seguido finalmente por quince millones de personas, quince millones de potenciales votantes, todo debe quedar perfectamente controlado. Así que estéticamente la cosa prometía para el hasta ahora presidente del Gobierno.
Pero mal que me pese, lo sucedido a lo largo de los siguientes 90 minutos terminaron con un resultado diáfano. Rajoy ganó el partido a Zapatero.
Alguien debería haberle explicado al mandatario socialista que un debate televisado de este calibre no es un partido de fútbol, por mucho que transcurra en el mismo tiempo que un 'match' dominical. El campeón hasta el momento, el que tiene las riendas del poder, el que continuando con el símil futbolístico es el campeón de la última Liga y presume de ello, suele quedarse agazapado con teórico aspecto de inocente en los encuentros en los que se enfrenta al equipo que pretende arañar los tres puntos. Generalmente, el modesto, o el aspirante en general, juega mejor, ilusiona a su hinchada, tiene múltiples oportunidades y... en el minuto 68 de la segunda parte, sin apenas haber trenzado jugada alguna, llega el 'gigante' y mete el gol. Espera hasta que ve la oportunidad, como un felino suficiente. Y si quedan quince minutos de partido, conocedor del golpe de gracia que te ha endosado, te mete otro. Y cuidado con un despiste en el descuento, porque te vas a casa con un 3-0 en contra y cara de imbécil. De nada sirve para el casillero de puntos decir que has jugado bien, pero sí para que la afición se percate de que debe seguir animando a su equipo. Nadie va a cambiarse la chaqueta para colocarse la del club grande.
Un debate político de esta altura no es un partido de fútbol. Y Zapatero creyó que sí lo era. Esperó con una suficiencia convertida por instantes en altanera confianza a que el que debe lograr los puntos lo atacara continuamente. Pero el dirigente socialista debe darse cuenta de que la 'afición' de quince millones ayer frente al televisor es muy probable que cuente con más de la mitad de espectadores que no son de ninguno de los dos 'equipos', por lo que aquí cuenta quien gane para que al final te voten. Y si se gana aportando jugadas fáciles pero muy efectivas como datos sobre vivienda, economía y con una serenidad pasmosa como la demostrada por Rajoy (disculpándole sus continuas miradas al reloj), pues el hasta ahora campeón pasa de defenderse como gato panza arriba a quedar arrinconado, a decir repetidas veces frases insustanciales o acusaciones ("ustedes han creado alarmismo, ustedes...") pero sin sustancia, defensa propia de políticos que no manejan detalles y cifras necesarias para que el espectador quede convencido.
No me gustó el presidente del Gobierno. Y es la primera vez que me sucede. Y sorprendentemente vi acertado el planteamiento del debate por parte de Rajoy. Por dos veces supo quitarse de encima el fracaso de los populares entre Solbes y Pizarro cuando Zapatero, consciente de que aquel 'tour de force' lo había ganado su ministro y podía aprovecharlo anoche, lo mencionó en dos ocasiones. "Aquí debatimos usted y yo, no otros dos, déjese...", le dijo el candidato del PP con una envidiable seguridad ante el titubeo del jefe del Ejecutivo.
Queda el partido de vuelta. No tendrá el mismo efecto que el de ida, pero es una buena ocasión para que Rodríguez Zapatero se redima y remonte el resultado adverso. Pero, insisto, esto no es un partido de fútbol aunque lo parezca. Mucho cuidado porque, tal y como están las cosas, quince millones de votos catódicos no sólo sirven para aupar a uno sobre el otro lo suficiente como para vencer por los pelos, sino que puedes perder por abrumadora mayoría. Y la sociedad española es lo suficientemente adulta como para percatarse de lo que dos candidatos le muestran durante 180 minutos. Fíjense si fue madura que en 72 horas decidió el 'Nunca mais' en los prolegómenos del 14 de marzo de 2004 y millones de españoles cambiaron su voto, al unísono, hartos del borreguismo beligerante en el que nos había metido el PP. Eso se llama madurez, no pueril indecisión ni cabreo momentáneo.
lunes, 25 de febrero de 2008
Enhorabuena
La gala de la 80 edición de los Oscar se recordará por sus resultados pero no por sí misma. La alegría del premio de Javier Bardem y la rotunda victoria de la película que le ha abierto las puertas de Hollywood, No es país para viejos de los hermanos Coen, marcan el recuerdo de una ceremonia aburrida, jalonada por muy prescindibles números musicales.
La gala arrancó con imágenes de un montaje futurista en el que aparecían estrellas del celuloide del pasado y de la actualidad, que dio paso al presentador y humorista Jon Stewart, quien celebró que el final de la huelga de guionistas haya permitido la celebración de la ceremonia. Afirmó, con humor, la celebración sanguinaria que este año se hace con películas nominadas como No es país para viejos, en que el personaje de Javier Bardem es un asesino despiadado, o con Pozos de ambición.
Ratatouille resultó galardonada con el Oscar a la Mejor Película de Animación del año. Este fue el tercer Oscar de la noche, tras el de vestuario, que recibió Alexandra Byrne por su trabajo en Elizabeth: La Edad de Oro (sí, esa película donde a los españoles nos ponen a parir-http://arrozamargo.blogspot.com/2007/11/escrita-por-los-vencedores.html) y el de maquillaje para La Vida en Rosa.
Bardem obtuvo el Oscar al Mejor Actor de Reparto, su primera estatuilla, por su aclamado papel de un asesino despiadado en No es país para viejos. Bardem, que ha recibido una veintena de premios con este papel, competía con Casey Affleck por El asesinato de Jesse James por el cobarte Robert Ford; Philip Seymour Hoffman por La guerra de Charlie Wilson; Hal Holbrook por Hacia rutas salvajes y Tom Wilkinson por Michael Clayton.
Al recibir el premio, Bardem, vestido con un traje negro, con camisa blanca y oscura corbata estrecha, bromeó por el aspecto que lucía en la película, "uno de los peores cortes de pelo de mi vida". En español, dedicó el premio a su madre, la actriz Pilar Bardem, a sus tíos y abuelos, también actores y cómicos, por haber engrandecido esta profesión. Tuvo palabras también de agradecimiento a los hermanos Cohen que fueron "lo suficientemente locos por creer en mí", dijo en inglés, tras añadir que "esto es increíble". Bardem, de 39 años, ya fue candidato a los premios en el año 2001 por la cinta de Julian Schnabel Antes que anochezca (2000).Con este galardón, que se suma a otra quincena de premios, entre ellos el Globo de Oro, el Bafta británico y el premio del Sindicato de Actores de Estados Unidos, Bardem se convierte en el primer actor español en recibir un Oscar.
Finalmente, el compositor español Alberto Iglesias no se llevó el Oscar a la mejor banda sonora por The Kite Runner. Normal. Es mala de cojones. Darío Marinelli ha hecho un bello score para Expiación y fue premiado, aunque lo mejor del año, Promesas del Este, de Howard Shore, no estaba ni nominado.
¡FELICIDADES, JAVIER!
La gala arrancó con imágenes de un montaje futurista en el que aparecían estrellas del celuloide del pasado y de la actualidad, que dio paso al presentador y humorista Jon Stewart, quien celebró que el final de la huelga de guionistas haya permitido la celebración de la ceremonia. Afirmó, con humor, la celebración sanguinaria que este año se hace con películas nominadas como No es país para viejos, en que el personaje de Javier Bardem es un asesino despiadado, o con Pozos de ambición.
Ratatouille resultó galardonada con el Oscar a la Mejor Película de Animación del año. Este fue el tercer Oscar de la noche, tras el de vestuario, que recibió Alexandra Byrne por su trabajo en Elizabeth: La Edad de Oro (sí, esa película donde a los españoles nos ponen a parir-http://arrozamargo.blogspot.com/2007/11/escrita-por-los-vencedores.html) y el de maquillaje para La Vida en Rosa.
Bardem obtuvo el Oscar al Mejor Actor de Reparto, su primera estatuilla, por su aclamado papel de un asesino despiadado en No es país para viejos. Bardem, que ha recibido una veintena de premios con este papel, competía con Casey Affleck por El asesinato de Jesse James por el cobarte Robert Ford; Philip Seymour Hoffman por La guerra de Charlie Wilson; Hal Holbrook por Hacia rutas salvajes y Tom Wilkinson por Michael Clayton.
Al recibir el premio, Bardem, vestido con un traje negro, con camisa blanca y oscura corbata estrecha, bromeó por el aspecto que lucía en la película, "uno de los peores cortes de pelo de mi vida". En español, dedicó el premio a su madre, la actriz Pilar Bardem, a sus tíos y abuelos, también actores y cómicos, por haber engrandecido esta profesión. Tuvo palabras también de agradecimiento a los hermanos Cohen que fueron "lo suficientemente locos por creer en mí", dijo en inglés, tras añadir que "esto es increíble". Bardem, de 39 años, ya fue candidato a los premios en el año 2001 por la cinta de Julian Schnabel Antes que anochezca (2000).Con este galardón, que se suma a otra quincena de premios, entre ellos el Globo de Oro, el Bafta británico y el premio del Sindicato de Actores de Estados Unidos, Bardem se convierte en el primer actor español en recibir un Oscar.
Finalmente, el compositor español Alberto Iglesias no se llevó el Oscar a la mejor banda sonora por The Kite Runner. Normal. Es mala de cojones. Darío Marinelli ha hecho un bello score para Expiación y fue premiado, aunque lo mejor del año, Promesas del Este, de Howard Shore, no estaba ni nominado.
¡FELICIDADES, JAVIER!
domingo, 24 de febrero de 2008
16 años de radio
La ceremonia de entrega de los Oscar se convierte cada año en una sensación agridulce. La espero con ansias porque el cine y su mundo me acompaña desde que era pequeño y, aunque la calidad de las películas actuales dista mucho del gran cine que se hacía antaño, siempre es motivo de reencuentro con filmes visionados a lo largo del año, contemplar la alfombra roja con los modelitos de los actores y actrices y el inmenso morbo por saber si realmente el ganador del Oscar a la mejor banda sonora se lo merece o, como casi siempre, el score mejor se queda sin su premio.
El cierto amargor que padezco es debido a la nostalgia. Mis 16 años en la radio realizando el programa Último Estreno dos o tres veces por semana, en noches inolvidables y generalmente buena compañía, es algo que pertenece a tu historial no sólo profesional, sino del corazón.
Yo empecé haciendo radio en septiembre de 1989, era un niño con 20 años y me quería comer el mundo, como muchos veinteañeros actuales los observo y también creen saberlo todo y se convierten en ejemplo de la inconsciencia y la negación de la magnitud de las cosas que hacemos con esa edad. Cuando en junio de 2005 comuniqué a mis oyentes mi definitiva marcha de la emisora, aquella noche a la que corresponde la foto de hoy, fue especialmente emotiva. En 16 años pasé de joven impetuoso a adulto más o menos consecuente, profesional del periodismo y que en mis cambios en mi vida personal y profesional siempre habían estado a mi lado, cada noche, esos micrófonos de la emisora de San Fernando. Pasaron colaboradores, algunos me defraudaron en diversos aspectos como a todos ustedes les habrá sucedido con otras personas en distintos ámbitos de la vida; llegaron nuevas personas que aportaron mucho, sobre todo una gran amistad (gracias Paco Belizón, de corazón Paco López, de siempre Paco Martín, sin pedir nada a cambio Benjamín Colsa,...) que aún hoy permanece. Aprendí muchísimo de aquellas explicaciones de mis músicos que alucinaban a la audiencia con su sapiencia a la hora de escudriñar cada banda sonora (experto en ello Belizón y no le iba a la zaga José Dopico, poniendo sus dosis de cariño Juan Ramón Laz, realizador de la primera página web de Último Estreno (www.geocities.com/webultimoestreno, que por cierto tengo que actualizar) y de Paco López, al que tenerlo esas noches en el estudio era un lujo cuando aparecía con las hojas de rodaje de El imperio del Sol, donde él ejercía de ayudante del equipo de dirección con Steven Spielberg, o gracias a él entrevistamos a la oscarizada Ivonne Blake, diseñadora de vestuario de Superman, jurado del Festival de San Sebastián,...
Cuántas experiencias en aquella emisora, cuántos festivales de cine emitidos en directo desde habitaciones de hoteles como el de Sitges, yo en la planta cuarta del Calípolis y en los estudios centrales de la emisora Miguel Ángel Fernández... Cuánta gente del cine entrevistada en directo (Juan Echanove, Imanol Arias, Benito Zambrano, Luis García Berlanga, José Luis Borau, Diego Galán,...) y aquella edificación de los cines Bahía Sur, ya hoy desaparecidos, cuando en un aseo aún en construcción tuvimos que guarecernos del ruido de las máquinas Ricardo Gil y yo para hacerle la entrevista y que mi antigua grabadora de principios de los noventa registrara el menor ruido posible... Gracias también a ti, Ricardo, cuántas noches de conversación cada vez que, como tú decías, "bajabas" desde Barcelona y quedábamos escapándote del hotel en Chiclana donde aguardaban tu mujer y tus hijos.
Las noches de los Oscar eran especiales porque las retransmitíamos en directo, en una sana costumbre desde 1992. Último Estreno era el único punto de referencia radiofónico de lo que sucedía en Hollywood en la noche de las estatuillas, comenzaba el programa a las doce y finalizaba cerca de las ocho de la mañana, colaborando en él con su participación telefónica el gran Carlos Pumares. Qué buena amistad fraguamos desde aquél Sitges de 1993 y cómo no dudaste en venir a San Fernando a ofrecer una conferencia en junio de 1995 para mi cine club Metrópolis. De ti hablaré otro día, amigo...
Si por aquel entonces hubiera existido internet, Último Estreno habría llegado muy lejos en la noche de los Oscar. Pero hace casi tres años que eché el cerrojo y bien echado. 'Nunca mais'... A pesar de que hoy no hay aparato de Canal Plus que no funciona hasta última hora, platos de tortilla y salchichón (qué ordinariez, ja, ja) para los colaboradores en la mesa del estudio, bebidas y muchos, muchos folios con apuestas y una gran colección de CDs por cualquier rincón con las bandas sonoras nominadas y ganadoras de otros años.
Esta noche, en la quietud de mi sofá, rememoraré aquellos momentos y, esbozando una sonrisa, disfrutaré de una ceremonia a la que le guardo mucho cariño.
El cierto amargor que padezco es debido a la nostalgia. Mis 16 años en la radio realizando el programa Último Estreno dos o tres veces por semana, en noches inolvidables y generalmente buena compañía, es algo que pertenece a tu historial no sólo profesional, sino del corazón.
Yo empecé haciendo radio en septiembre de 1989, era un niño con 20 años y me quería comer el mundo, como muchos veinteañeros actuales los observo y también creen saberlo todo y se convierten en ejemplo de la inconsciencia y la negación de la magnitud de las cosas que hacemos con esa edad. Cuando en junio de 2005 comuniqué a mis oyentes mi definitiva marcha de la emisora, aquella noche a la que corresponde la foto de hoy, fue especialmente emotiva. En 16 años pasé de joven impetuoso a adulto más o menos consecuente, profesional del periodismo y que en mis cambios en mi vida personal y profesional siempre habían estado a mi lado, cada noche, esos micrófonos de la emisora de San Fernando. Pasaron colaboradores, algunos me defraudaron en diversos aspectos como a todos ustedes les habrá sucedido con otras personas en distintos ámbitos de la vida; llegaron nuevas personas que aportaron mucho, sobre todo una gran amistad (gracias Paco Belizón, de corazón Paco López, de siempre Paco Martín, sin pedir nada a cambio Benjamín Colsa,...) que aún hoy permanece. Aprendí muchísimo de aquellas explicaciones de mis músicos que alucinaban a la audiencia con su sapiencia a la hora de escudriñar cada banda sonora (experto en ello Belizón y no le iba a la zaga José Dopico, poniendo sus dosis de cariño Juan Ramón Laz, realizador de la primera página web de Último Estreno (www.geocities.com/webultimoestreno, que por cierto tengo que actualizar) y de Paco López, al que tenerlo esas noches en el estudio era un lujo cuando aparecía con las hojas de rodaje de El imperio del Sol, donde él ejercía de ayudante del equipo de dirección con Steven Spielberg, o gracias a él entrevistamos a la oscarizada Ivonne Blake, diseñadora de vestuario de Superman, jurado del Festival de San Sebastián,...
Cuántas experiencias en aquella emisora, cuántos festivales de cine emitidos en directo desde habitaciones de hoteles como el de Sitges, yo en la planta cuarta del Calípolis y en los estudios centrales de la emisora Miguel Ángel Fernández... Cuánta gente del cine entrevistada en directo (Juan Echanove, Imanol Arias, Benito Zambrano, Luis García Berlanga, José Luis Borau, Diego Galán,...) y aquella edificación de los cines Bahía Sur, ya hoy desaparecidos, cuando en un aseo aún en construcción tuvimos que guarecernos del ruido de las máquinas Ricardo Gil y yo para hacerle la entrevista y que mi antigua grabadora de principios de los noventa registrara el menor ruido posible... Gracias también a ti, Ricardo, cuántas noches de conversación cada vez que, como tú decías, "bajabas" desde Barcelona y quedábamos escapándote del hotel en Chiclana donde aguardaban tu mujer y tus hijos.
Las noches de los Oscar eran especiales porque las retransmitíamos en directo, en una sana costumbre desde 1992. Último Estreno era el único punto de referencia radiofónico de lo que sucedía en Hollywood en la noche de las estatuillas, comenzaba el programa a las doce y finalizaba cerca de las ocho de la mañana, colaborando en él con su participación telefónica el gran Carlos Pumares. Qué buena amistad fraguamos desde aquél Sitges de 1993 y cómo no dudaste en venir a San Fernando a ofrecer una conferencia en junio de 1995 para mi cine club Metrópolis. De ti hablaré otro día, amigo...
Si por aquel entonces hubiera existido internet, Último Estreno habría llegado muy lejos en la noche de los Oscar. Pero hace casi tres años que eché el cerrojo y bien echado. 'Nunca mais'... A pesar de que hoy no hay aparato de Canal Plus que no funciona hasta última hora, platos de tortilla y salchichón (qué ordinariez, ja, ja) para los colaboradores en la mesa del estudio, bebidas y muchos, muchos folios con apuestas y una gran colección de CDs por cualquier rincón con las bandas sonoras nominadas y ganadoras de otros años.
Esta noche, en la quietud de mi sofá, rememoraré aquellos momentos y, esbozando una sonrisa, disfrutaré de una ceremonia a la que le guardo mucho cariño.
sábado, 23 de febrero de 2008
La Banda Municipal de San Fernando mantiene en estas semanas una frenética agenda de actuaciones y conciertos debido a la celebración de la Cuaresma y la inminente Semana Santa.
De pequeño era un gran seguidor de las marchas procesionales. Los tiempos cambian, los gustos musicales también pero permanece el poso de aquellas aficiones de muchos años atrás en donde se daban mescolanzas musicales teóricamente improbables. En mi plato giradiscos (no existía obviamente el formato CD) lo mismo sonaba Soleá dame la Mano, Amargura o Jesús Preso que el primer disco de Mecano, con su reloj en la portada, o Barón Rojo.
En definitiva, lo que deseo expresar es que la Banda Municipal de San Fernando es una extraordinaria formación musical en la que tengo a bien contar con amigos, dirigida por Francisco Hernández Lora, todo un ejemplo de lo que se puede calificar como buena gente. El magnífico progreso experimentado por esta banda desde su creación, en 1992, ha sido gracias a la sapiencia de su director y la valía de sus músicos, y es una lástima que miles de personas sólo la conozcan por acompañar a los pasos durante la Semana Santa isleña. No obstante, su público va incrementándose en sus conciertos de música clásica, de bandas sonoras cinematográficas, de piezas arregladas de grandes maestros,... su valía se ha demostrado con grabaciones de calidad bajo producciones avaladas, entre otros, por RTVE, y sacaron a la luz un CD de música de cine de gran calidad con un libreto en el que destacamos con nuestros artículos el papel de esta agrupación musical el compositor Roque Baños, el cineasta Luis García Berlanga y un servidor, entre otros. He tenido además la dicha de trabajar conjuntamente con ellos en conciertos de música de cine donde hemos acoplado la proyección de las películas en cuestión a la música que en directo ha interpretado esa banda, logrando un espectáculo de gran belleza que se estrenó en el verano de 2006.
Ahora, en estos días, la Municipal isleña será muy oída en la calle. Quiero desearles a todos una feliz Cuaresma y Semana Mayor. Es difícil recompensar económicamente a estos músicos que, desde el Domingo de Ramos hasta el Viernes Santo, procesionan durante ocho, diez o doce horas diarias. Que todo el mundo sepa valorar vuestro trabajo como lo supieron reconocer jurados de certámenes en los que habéis participado, recibiendo incluso premios.Quiero también destacar la labor de José Ribera Tordera como director de la sección juvenil de la Banda Municipal, unos pequeños y sorprendentes músicos a los que os invito a escuchar cada vez que ofrezcan un concierto. Vais a alucinar.
De pequeño era un gran seguidor de las marchas procesionales. Los tiempos cambian, los gustos musicales también pero permanece el poso de aquellas aficiones de muchos años atrás en donde se daban mescolanzas musicales teóricamente improbables. En mi plato giradiscos (no existía obviamente el formato CD) lo mismo sonaba Soleá dame la Mano, Amargura o Jesús Preso que el primer disco de Mecano, con su reloj en la portada, o Barón Rojo.
En definitiva, lo que deseo expresar es que la Banda Municipal de San Fernando es una extraordinaria formación musical en la que tengo a bien contar con amigos, dirigida por Francisco Hernández Lora, todo un ejemplo de lo que se puede calificar como buena gente. El magnífico progreso experimentado por esta banda desde su creación, en 1992, ha sido gracias a la sapiencia de su director y la valía de sus músicos, y es una lástima que miles de personas sólo la conozcan por acompañar a los pasos durante la Semana Santa isleña. No obstante, su público va incrementándose en sus conciertos de música clásica, de bandas sonoras cinematográficas, de piezas arregladas de grandes maestros,... su valía se ha demostrado con grabaciones de calidad bajo producciones avaladas, entre otros, por RTVE, y sacaron a la luz un CD de música de cine de gran calidad con un libreto en el que destacamos con nuestros artículos el papel de esta agrupación musical el compositor Roque Baños, el cineasta Luis García Berlanga y un servidor, entre otros. He tenido además la dicha de trabajar conjuntamente con ellos en conciertos de música de cine donde hemos acoplado la proyección de las películas en cuestión a la música que en directo ha interpretado esa banda, logrando un espectáculo de gran belleza que se estrenó en el verano de 2006.
Ahora, en estos días, la Municipal isleña será muy oída en la calle. Quiero desearles a todos una feliz Cuaresma y Semana Mayor. Es difícil recompensar económicamente a estos músicos que, desde el Domingo de Ramos hasta el Viernes Santo, procesionan durante ocho, diez o doce horas diarias. Que todo el mundo sepa valorar vuestro trabajo como lo supieron reconocer jurados de certámenes en los que habéis participado, recibiendo incluso premios.Quiero también destacar la labor de José Ribera Tordera como director de la sección juvenil de la Banda Municipal, unos pequeños y sorprendentes músicos a los que os invito a escuchar cada vez que ofrezcan un concierto. Vais a alucinar.
jueves, 21 de febrero de 2008
Mi amigo, mi pregonero
La Hermandad de la Misericordia de San Fernando celebra este viernes uno de los acontecimientos más tradicionales en el calendario cofrade anual de esa ciudad: el Pregón de la Juventud Cofrade. En esta ocasión, son ya 28 las ediciones. Se dice bien pronto.
Tuve la dicha de pregonar a los jóvenes en la Cuaresma de 1992. Desde entonces acá ya ha llovido, los tiempos han cambiado, los jóvenes también, no usábamos internet en aquellos tiempos y en deseábamos que llegara el sábado para destinar nuestros esfuerzos como jóvenes en hacer una gran grupo fraternal, que no es ni más ni menos que una hermandad, el resto es accesorio.
Ahora es el turno de Manuel García Almarcha. Cuando mis nerviosas y torpes palabras salían de mi boca aquella noche cuaresmal de hace ya 16 años, Manolito apenas tenía ocho o nueve años, si no me fallan las cuentas. No lo conocía por entonces y ahora me siento dichoso de habernos unido por el signo de la amistad hace ya algunos años y compartir con él nuestro amor y devoción a los titulares y a la propia hermandad.
No es mi intención caer en tópicos. Sólo quiero expresar, horas antes de su disertación, mis más sinceros deseos de que nos deleite con un gran pregón, de que ofrezca todo lo que le sale del alma y Jesús de la Misericordia lo ayude en la noche de este viernes y lo acompañe, como seguro estoy lo hará, para hacernos vivir, en nuestra alma, las cosas que él nos desee transmitir. Un fuerte abrazo, Manolo, de un pregonero ya difuminado por el paso del tiempo, a un naciente orador como tú. Un fuerte abrazo, sí, en nuestra fraternal amistad y en el seno de nuestra querida hermandad.
Manolo es mi amigo. Manolo es mi hermano.
Fotografía: Manolo García Almarcha, en el centro de la imagen, junto a Carlos Fernández (d) y a mí en la caseta de la hermandad, en la Feria del Carmen y de la Sal, en julio de 2006.
Tuve la dicha de pregonar a los jóvenes en la Cuaresma de 1992. Desde entonces acá ya ha llovido, los tiempos han cambiado, los jóvenes también, no usábamos internet en aquellos tiempos y en deseábamos que llegara el sábado para destinar nuestros esfuerzos como jóvenes en hacer una gran grupo fraternal, que no es ni más ni menos que una hermandad, el resto es accesorio.
Ahora es el turno de Manuel García Almarcha. Cuando mis nerviosas y torpes palabras salían de mi boca aquella noche cuaresmal de hace ya 16 años, Manolito apenas tenía ocho o nueve años, si no me fallan las cuentas. No lo conocía por entonces y ahora me siento dichoso de habernos unido por el signo de la amistad hace ya algunos años y compartir con él nuestro amor y devoción a los titulares y a la propia hermandad.
No es mi intención caer en tópicos. Sólo quiero expresar, horas antes de su disertación, mis más sinceros deseos de que nos deleite con un gran pregón, de que ofrezca todo lo que le sale del alma y Jesús de la Misericordia lo ayude en la noche de este viernes y lo acompañe, como seguro estoy lo hará, para hacernos vivir, en nuestra alma, las cosas que él nos desee transmitir. Un fuerte abrazo, Manolo, de un pregonero ya difuminado por el paso del tiempo, a un naciente orador como tú. Un fuerte abrazo, sí, en nuestra fraternal amistad y en el seno de nuestra querida hermandad.
Manolo es mi amigo. Manolo es mi hermano.
Fotografía: Manolo García Almarcha, en el centro de la imagen, junto a Carlos Fernández (d) y a mí en la caseta de la hermandad, en la Feria del Carmen y de la Sal, en julio de 2006.
miércoles, 20 de febrero de 2008
Parecidos razonables (II)
Esta noche me he despertado con fríos sudores y asiendo la nada con las manos. Una nueva imagen se me vino a la mente. Desconozco si es que la última película de Tim Burton me ha impactado o es que la revista Fotogramas debería contratarme para su tradicional sección de similitudes humanas...
Pero llevaba también desde el sábado manteniendo en mi mente, aturdido, la imagen de Beadle Bamford, el repugnante personaje secundario que acompaña al juez Turpin en Sweeney Todd, que a decir verdad parece más bien un secundario grotesco y ridículo que acompaña a los malvados en las películas de Disney que un integrante de la sangrienta historia del barbero vengador. Esa cara regordita y de mirada alocada, esas paletas centrales presidiendo su caja de dientes, ese sombrero, esa sonrisa, andares, atuendos y pelambrera... ¡Eureka! Lo encontré. Es igualito también a...EL SOMBRERERO LOCO DE Alicia en el país de las maravillas.
Y ojo, que también he sabido hace días que Tim Burton está preparando un remake de la famosa cinta de Disney para estrenarla en el año 2010. ¿Contará con Timothy Spall, que es el nombre del actor que encarna al sicario de Turpin?
Pero llevaba también desde el sábado manteniendo en mi mente, aturdido, la imagen de Beadle Bamford, el repugnante personaje secundario que acompaña al juez Turpin en Sweeney Todd, que a decir verdad parece más bien un secundario grotesco y ridículo que acompaña a los malvados en las películas de Disney que un integrante de la sangrienta historia del barbero vengador. Esa cara regordita y de mirada alocada, esas paletas centrales presidiendo su caja de dientes, ese sombrero, esa sonrisa, andares, atuendos y pelambrera... ¡Eureka! Lo encontré. Es igualito también a...EL SOMBRERERO LOCO DE Alicia en el país de las maravillas.
Y ojo, que también he sabido hace días que Tim Burton está preparando un remake de la famosa cinta de Disney para estrenarla en el año 2010. ¿Contará con Timothy Spall, que es el nombre del actor que encarna al sicario de Turpin?
martes, 19 de febrero de 2008
Parecidos razonables
Un inquietante pensamiento me venía a la mente el sábado viendo la última película de Tim Burton, la más desmadrada, la mas gore, la más surrealista y la más repugnante. Aquella imagen del despiadado barbero encarnado por Johnny Depp me recordaba a otra que, además, había visto poco tiempo atrás...
Rebusqué en mis fotogramas mentales recopilados procedentes de las últimas películas. ¿Algún personaje secundario? ¿Algún actor en rueda de prensa? No.
Entre chorreones de sangre y canciones de Stephen Sondheim traté de descubrir si Sweeney Todd me retrotraía a la imagen de un familiar lejano, o algún angango de La Isla... tampoco.
En los créditos finales de la película descubrí la luz. Fue en ese momento cuando me percaté de QUIÉNES ERAN IGUALITOS...
lunes, 18 de febrero de 2008
Inutilidades
Yo me pregunto, en mi soberana ignorancia, para qué sirve un mitin de un partido político. Son como las tapias de los cementerios, absolutamente prescindibles, porque nadie quiere entrar y nadie puede salir...
Basta con verlos en televisión. Porque los que acuden a esas concentraciones en las que los líderes políticos sueltan impunemente sus promesas son los propios militantes, afiliados y simpatizantes. Vamos, que hoy tengo el día libre y no me da por cambiar la última película de Tim Burton por ir con un paquete de pipas de girasol a un mitin de Javier Arenas. No me interesa lo más mínimo. Y no conozco a nadie que en sus ratos libres tenga como afición acudir a los mítines electorales con una banderita en ristre en la que se aprecia el emblema de un partido. La gente va al cine, al fútbol, caza, pesca, se alquila pelis pornos, juega a la Wii, toma café, duerme la siesta o fornica, pero no va a ver a los políticos.
Basta con verlos en televisión. Porque los que acuden a esas concentraciones en las que los líderes políticos sueltan impunemente sus promesas son los propios militantes, afiliados y simpatizantes. Vamos, que hoy tengo el día libre y no me da por cambiar la última película de Tim Burton por ir con un paquete de pipas de girasol a un mitin de Javier Arenas. No me interesa lo más mínimo. Y no conozco a nadie que en sus ratos libres tenga como afición acudir a los mítines electorales con una banderita en ristre en la que se aprecia el emblema de un partido. La gente va al cine, al fútbol, caza, pesca, se alquila pelis pornos, juega a la Wii, toma café, duerme la siesta o fornica, pero no va a ver a los políticos.
Así que, insisto, ¿para qué sirve un mitin?
Para nada. El orador de turno promete a gente que, aunque les hablara en cantonés, lo van a votar, ya están en el cupo del partido, así que da igual lo que les cuente porque no tiene necesidad de convencerlos, de manera que desde el punto de vista de captación de votos, los mítines son inútiles. Se convierten entonces en un gran ejercicio de onanismo político, en el que los que oyen escuchan lo que no necesitan y el que habla dice cosas sin necesidad, pero todos lo pasan bien creyéndose medias verdades, mentiras y zarandajas.
Desde el punto de vista informativo, los mítines tampoco son útiles. Porque ustedes, como yo, tendrán saturado el buzón de programas electorales y de puntos programáticos, así que todo el mundo ya sabe lo que defiende la derecha y la izquierda. Y los que navegan al son de las olas entre ambos conceptos, nos interesan menos.
De manera que yo pregunto cuánto cuesta hacer un mitin. Qué presupuesto tienen dentro de los gastos de las formaciones políticas, y mi interés es totalmente legítimo, porque para eso yo mantengo el sistema partiticrático con mis impuestos. ¿O acaso son tan ingenuos como los abonados de los clubes de fútbol, que creen que con la cuota que ellos pagan mantienen al monstruo económico que supone un club? ¿También piensan que los afiliados del PSOE, PP o IU son los que mantienen tantos fastos electorales?
Abogo por inventar algo distinto, no sé, doctores tiene la iglesia. Pero cada vez que veo en la tele un mitin, pienso en lo que disfrutaría Fellini o Berlanga haciendo un película surrealista sobre semejante idiotez.
sábado, 16 de febrero de 2008
El universo gótico del gran Tim Burton
Resulta curioso que los cimientos del cine se hayan tambaleado durante estos últimos meses debido a una huelga promovida precisamente por los artistas cinematográficos que menos han progresado y carentes de la más mínima imaginación. Todo ha evolucionado en el celuloide de treinta años hacia acá: los directores de fotografía han logrado prodigios de luz, las bandas sonoras han experimentado variedades estilísticas que suplieron al clasicismo anacrónico para las nuevas tendencias ideológicas y estéticas que emergieron desde los años setenta, las cámaras y técnicas de montaje nada tienen que ver con lo existente en los tiempos de De Mille, Curtiz, Wyler,... Pero los guiones son indudablemente peores.
En este aspecto no hemos avanzado nada. Lo más negativo de las películas de hoy día son las historias que cuentan, lo manido de sus sinopsis, lo simplón de la narración, la carencia de diálogos chispeantes,... Y justo los que menos han progresado, los que menos ofrecen, van a la huelga. Cuanto menos, paradójico.
En esta pobreza guionística actual, siempre habrá excepciones que, independientemente de lo atrayente que para determinados sectores del público puedan ser por las temáticas tratadas, aportan ejemplos de originalidad en las historias que nos cuentan a través de las imágenes y nunca defraudan por su rabiosa originalidad. Tal es el caso del cineasta Tim Burton, que esta semana estrena en España su última película: Sweeney Todd, la historia de un sangriento y vengativo barbero en connivencia con la actriz fetiche del director, Helena Bonham Carter.
Tim Burton es sinónimo de frescura, de dinamismo y prácticamente el valedor del regreso del cine gótico a la pantalla actual. Sus trazos y personajes de sus obras maestras Pesadilla antes de Navidad o La novia cadáver están fuertemente influenciadas por un expresionismo neogótico al que contribuye de una manera excepcional su músico habitual, Danny Elfman, con el que ha trabajado en la gran mayoría de sus películas, con las excepciones de Ed Wood y Sweeney Todd, esta última por razones obvias, ya que la historia original es un musical que escribió en su día Stephen Sondheim, uno de los grandes letristas del musical hollywoodiense.
Exhibidor de un dudoso gusto temático y visual (Sleepy Hollow), narrador de fantásticas historias con reminiscencias de clásicos de Tod Browning (Eduardo Manostijeras), gamberro espacial y desmitificador de las catástrofes espaciales (Mars Attacks!), contador de historias imposibles paternofiliales (Big Fish) o de transformar a Johnny Deep en Michael Jackson en una revisitación liliputiense (Charlie y la fábrica de chocolate), Tim Burton nunca defrauda desde el punto de vista de la elección de sus historias. Incluso rescatando historias de leyendas existentes muchas décadas atrás como La novia cadáver, ha sabido envolverlas con los aderezos de su mundo particular, en el que tienen mucho que ver sus dibujos y sus técnicos como Danny Elfman, para traernos momentos inolvidables en el cine, caso de Martin Landau oliendo la fragancia de las rosas, Will con su padre en brazos en el agua en Big Fish o Sally cosiéndose su brazo recién huida en Pesadilla antes de Navidad.
miércoles, 13 de febrero de 2008
Los otros
El Boletín Oficial del Estado (BOE) publicó este lunes la proclamación de las candidaturas concurrentes a las elecciones al Congreso de los Diputados y al Senado, en el proceso electoral que tendrá lugar el próximo 9 de marzo. El plazo de admisión de siglas se cierra así de esta manera y en total son 18 las candidaturas presentadas al Congreso.
El bipartidismo tan presente actualmente en la sociedad española puede hacer pensar que la gran mayoría de las formaciones políticas que se presentan apenas obtendrán resultados de relevancia y una gran mayoría se podrán calificar de testimoniales, aunque eso dependerá definitivamente del voto del ciudadano. Para el próximo 9-M, las opciones registradas para ofrecerse como alternativa de Gobierno son nada menos que 18 en el caso del Congreso de los Diputados y 17 para el Senado.
De las 18 agrupaciones que aspirarán a obtener la confianza de los gaditanos en su voto la Congreso de los Diputados, las más habituales estarán representadas por el PSOE o el PP, que obviamente presentan candidatura tanto al Congreso como al Senado. En el extenso rosario de formaciones políticas cuya actividad se resume prácticamente a los prolegómenos electorales se encuentran partidos cuando menos curiosos. Tal es el caso de Alternativa Española (AE), el Partido Positivista Cristiano (PPCr), el Partido Social Demócrata (PSD) o la nueva formación creada por la ex socialista Rosa Díez, Unión Progreso y Democracia (UPyD).
El arco ideológico es muy variado. Formaciones como Alternativa Española (AE) o Democracia Nacional (DN) se identifican con el conservadurismo católico y el ultraderechismo, mientras que el PSD trata de cosechar votos de la izquierda entre los desencantados del PSOE. Llama la atención la presentación, en las dos cámaras, del Partido Antitaurino contra el Maltrato Animal (Pacma), con todas sus candidaturas al completo, o formaciones defensoras de los derechos del inmigrante y de los flujos migratorios como Por un mundo más justo. (Pum+J).
En las listas más habituales, todos los puestos ya están cubiertos y sus líderes calientan motores de cara a la campaña electoral. De esta manera, el PP tendrá a Teófila Martínez como cabeza de lista al Congreso frente a Alfredo Pérez Rubalcaba por el PSOE, mientras que el resto de formaciones con posibilidades de obtener escaños como Izquierda Unida presentan al alcalde puertorrealeño José Antonio Barroso o Coalición Andalucista a Jorge Romero.
Una de las ‘aficiones’ existentes entre los ciudadanos que acuden a votar en las elecciones cada cuatro años es reparar con detenimiento en las formaciones políticas que se presentan, independientemente del criterio que ostenten a la hora de decantarse por alguna opción.
Para muchos, resulta sorprendente que cada cuatro años aparezcan nutridas listas de candidatos que forman parte de partidos políticos que parecen extintos durante el resto de la legislatura. En este sentido, llaman la atención las formaciones que nunca faltan a las citas electorales a pesar de su escasa relevancia en el panorama político nacional. Tal es el caso del Partido Humanista o Falange Española de las Jons, ambas presentes tanto en las aspiraciones al Congreso como al Senado. En el caso de los falangistas, se presentan en Cádiz incluso en dos de sus tendencias, los ‘oficiales’ y los ‘auténticos’ (Falange Auténtica), de clara tendencia izquierdista y reivindicadora de la figura social y revolucionaria de José Antonio Primo de Rivera. Otros no dejan de ser sorprendentes, como ‘Ciudadanos-Partido de la Ciudadanía’, que presenta candidatura en Cádiz al Congreso y la Senado, tratándose de una formación netamente de carácter nacionalista catalana.
domingo, 10 de febrero de 2008
Mi cruz de guía
Comienza la cuenta atrás para, como dijo Enrique Montiel en su pregón de la Semana Santa, "el milagro de la primavera isleña". Permitidme que en las próximas semanas me decante por esa enrabietada manifestación de los sentidos que significa la Semana Santa.
Soy creyente y crítico. Es decir, más creyente aún que muchos. Soy cofrade e inconformista. Es decir, más cofrade que otros. Me repugnan los becerros del oro y me rebelo contra los que dicen que las hermandades no estamos para dar de comer al hambriento. El día que mis hermandades no dediquen una buena parte de su presupuesto a la justicia social, renegaré de ellas. Pero como no sucede, y como a pesar de sus innumerables imperfecciones y defectos la Semana Santa me conduce al éxtasis de mis sentimientos, seguiré siendo aprendiz de cofrade hasta que me muera. Y me erizará el vello la mescolanza del incienso, el azahar y la cera.
Y seguiré defendiendo que no hay manifestación artística más perfecta que un paso. Y sobre todo, un paso de palio. Es cierto que no hay nada más perfecto que un soneto. Sobre todas las cosas artísticas, el soneto literario es el culmen de la perfección. Los más grandes poetas han sido grandes porque han escrito sonetos. Si no, no son nada. El soneto es perfecto. Pero el paso de palio lo es más aún. El soneto tiene catorce versos, y el palio tiene doce varales. Debe ser que al soneto le sobran dos versos. Sí, porque estoy convencido de que al palio no le falta nada. Su canon estético es tan perfecto, que tiene que tener doce varales. Por eso, es al soneto, indudablemente, al que le sobran dos versos...
"Noche de viernes joven. Desde hace varios años, los viernes de la juventud cofrade elegidos en Cuaresma, por obra y gracia de la Hermandad de la Misericordia, se convierten en un destacado eslabón de esa cadena que conforma el preludio de nuestra Semana Mayor. Las puertas de los templos van cubriendo su majestuosidad con las barrocas proclamas de cultos, en las cuales las grecas soportan orgullosamente las benditas imágenes de los sagrados titulares y acompañan en su entramado al conjunto dibujado por artistas y devotas manos. Los cofrades no descansan... y menos el joven. Los sábados y domingos se transforman en días de peregrinaje por las calles de La Isla, dejando en los tranquilos hogares las estampas de Cristo y María en sus distintas advocaciones, como acto único y peculiar, hecho ya tradición, de La Isla. Casualmente, desde el primer escalón de entrada, en el interior de alguna casa se oirán, como un lejano pero familiar rumor, en una mescolanza enrabietada de los sentidos del oído y el olfato despertado con el aroma del incienso, los acordes acompasados de Amargura, La Madrugá o Nuestro Padre Jesús de la Misericordia, venidos de una cerrada habitación en la cual con toda seguridad, habrá un joven que horas después limpiará la plata, recogerá su túnica y asistirá a esa reunión convocada en la misma mañana para que todo transcurra, durante estas ajetreadas jornadas, tal y como se viene organizando tradicionalmente. Faltarán menos días para que, a horas inusuales, forme parte del desordenado orden que se vivirá en la parroquia las noches anteriores a la salida procesional. Allá, en la sacristía, en una recogida esquina, un grupo de jóvenes conversan y cuentan mil y una anécdotas cofradieras, mientras los claveles y lirios del monte del paso se pinchan con las ya amoratadas manos. Los más artistas, con la sensibilidad consciente a flor de piel durante esos días, trabajan en el palio, dibujan con el perfil y el olor de blancos encajes florales las jarras que acompañan a María en su andadura, lenta y pausada, por las calles de La Isla...".
(Del Pregón de la Juventud Cofrade-1992. San Fernando)
miércoles, 6 de febrero de 2008
Nuestro sondeo particular
A tenor de la encuesta realizada en este blog, las elecciones generales del 9 de marzo tendrán un claro vencedor. Es obvio que apenas contabilizamos una treintena de votos, pero me llama la atención que se haya convertido en el sondeo de mayor participación en Arroz amargo desde hace un año.
Sinceramente, creo que los resultados de las urnas no van a diferir mucho, aunque imagino que el Partido Popular alcanzará algunos puntos porcentuales más que los reflejados en la parte derecha del blog.
Aquí, ustedes han decidido concederle la mayoría absoluta al PSOE, ya que de 28 votos, 15 son para ZP y su formación política, lo que supone el 53% del total. Atrás quedan el PP con 9 votos, es decir, el 32% para Mariano Rajoy, mientras que el 10% del total de sufragios ha respaldado a Gaspar Llamazares y el 3% se reparte en otros partidos minoritarios.
¿Coincidiremos con el 9-M? Vaya palo para el PP y vaya espaldarazo al PSOE. La solución, en poco más de un mes...
lunes, 4 de febrero de 2008
Esto NO es Carnaval
Admito que soy mucho de COAC y me incluyo un poco como Vicente, (no el concejal) donde va la gente, cuando participo del Carnaval en la calle. Me interesan mucho más los repertorios copleros que la fiesta callejera, especialmente tal y como la ciudad la está sufriendo desde hace algunos años.Huyo de la noche del sábado despavorido lanzando alaridos tanto como los componentes de la chirigota del Yuyu y mi buen amigo Sánchez Reyes, al que felicito efusivamente por su actuación en la final y especialmente la ofrecida 24 horas antes.
Me refugio en el domingo de coros. ¿De coros? ¿De agrupaciones? Los botellones imperan desde primeras horas de la tarde, las borracheras ya se prodigan aún de día y las calles empiezan a apestar a orín sin que haya caído la noche. Lo de ayer fue francamente lamentable. Traté de buscar el Carnaval, ya ni siquiera su esencia en la calle porque esa se perdió hace tiempo, no pierdo el tiempo escudriñando las esquinas para saber de su perfume (al hilo del nombre de cierta agrupación este año), sino siquiera el 'agua de colonia' de la fiesta, lo más barato, lo que al menos me dejara en la pituitaria el olor y sabor de algo del Carnaval que debemos desear todos los gaditanos...
Vano intento. La fiesta se ha convertido en la calle en un gran macrobotellón horrendo, con disfraces grotestos y ridículos, con la anuencia de las agrupaciones que apenas aparecen cuando termina la cabalgata y un barrio de La Viña asqueroso y convertido en un gran WC donde vaciarse.
¿Qué diferencia existe entre un botellón de fin de semana de jóvenes y una noche de Carnaval gaditana actualmente? Sólo dos: el número de participantes y el alcohol ofrecido en cada esquina. Barras cutres de pizarras mal escritas y mostradores de Cruzcampo vendiendo lotes de alcohol, refresco, hielo, vómitos en casapuertas, droga a raudales y, curiosamente, sólo jóvenes en las calles, cuando el Carnaval es de todos. Hemos relegado a sus casas a generaciones a las que les espanta un esperpento que, como gaditano, me hace sonrojar.
Tengo amigos del gremio periodístico, del cine, etc. de distintos lugares de España a los que me cuesta trabajo convencerlos para que no vengan al Carnaval de Cádiz e incluso algunos creen que no deseo cargar con la responsabilidad de atenderlos. Hasta que contemplan reportajes fotográficos que les envío. Me da verguenza este Cádiz cutre que hemos inventado.
viernes, 1 de febrero de 2008
Yo quisiera preguntar
Yo quisiera preguntarles a qué saben los manjares de la gula mientras la gente se muere por la infamia y la perfidia; aclaradme, santidades, si para Dios fue motivo de burla las mujeres maltratadas, niños sin pan y hombres sin justicia.
Yo quisiera preguntarles si han bajado de sus altares indecentes para salir a la calle contra un Gobierno que eligió el sufragio universal, cuando tras siglos de lucha el hombre ya ha logrado ser valiente para relegaros a vuestras poltronas manchadas de sangre inocente y del mal.
Yo quisiera saber porqué no desplegáis vuestras sotanas al viento, delante de tanques y misiles, para repeler las balas y el aliento de los señores de la guerra y visires que disfrutan con el tormento.
Mirad aquella foto del niño escuálido y el buitre acechando, con sus alas tan negras como vuestras plegarias condenando lo que el hombre se ha ganado tras siglos deseando apartar una religión que condena al hombre por desear su libertad y sobre el alma su mando.
¿Qué pedís? ¿A quién representáis? Escuchad bien de lo que hablo, ¿vendéis el oro para saciar el hambre humana o saciáis el hambre humana de oro y os vendéis al diablo? ¿Pedís no votar a los partidos que negocien con ETA? ¿También váis a ordenarnos que no votemos a los partidos que nos metieron en guerra?
Condenáis el divorcio cuando lo practicáis con la sociedad, echáis al fuego el sexo cuando lo hacéis hasta la saciedad; exorcizáis las parejas de hecho pero no al demonio de la deslealtad. Deslealtad a Jesucristo, a sus fieles mandatos, a la sangre derramada por miles de Pilatos que hoy veo con mitras y tiaras en la cristiandad.
Yo quisiera preguntarles si han bajado de sus altares indecentes para salir a la calle contra un Gobierno que eligió el sufragio universal, cuando tras siglos de lucha el hombre ya ha logrado ser valiente para relegaros a vuestras poltronas manchadas de sangre inocente y del mal.
Yo quisiera saber porqué no desplegáis vuestras sotanas al viento, delante de tanques y misiles, para repeler las balas y el aliento de los señores de la guerra y visires que disfrutan con el tormento.
Mirad aquella foto del niño escuálido y el buitre acechando, con sus alas tan negras como vuestras plegarias condenando lo que el hombre se ha ganado tras siglos deseando apartar una religión que condena al hombre por desear su libertad y sobre el alma su mando.
¿Qué pedís? ¿A quién representáis? Escuchad bien de lo que hablo, ¿vendéis el oro para saciar el hambre humana o saciáis el hambre humana de oro y os vendéis al diablo? ¿Pedís no votar a los partidos que negocien con ETA? ¿También váis a ordenarnos que no votemos a los partidos que nos metieron en guerra?
Condenáis el divorcio cuando lo practicáis con la sociedad, echáis al fuego el sexo cuando lo hacéis hasta la saciedad; exorcizáis las parejas de hecho pero no al demonio de la deslealtad. Deslealtad a Jesucristo, a sus fieles mandatos, a la sangre derramada por miles de Pilatos que hoy veo con mitras y tiaras en la cristiandad.
jueves, 31 de enero de 2008
Hagan apuestas
Hagan sus apuestas. Es noche de cuchillos largos en Cádiz. En realidad, odio esa expresión hecha. Tanto como otras que suelen utilizar algunos en los medios de comunicación y que no puedo con mi vida cuando las leo o escucho, caso de "pistoletazo de salida", "de poder a poder", "temas a tratar", "decir que"...
No entiendo porqué cuesta tanto trabajo evitar las frases hechas, sobre todo cuando son de tan mal gusto como la colección de bichos esos que ofrece un periódico en Cádiz. ¿Cómo puede alguien querer tener un escorpión metido en un taco de cristal encima del televisor de su casa? Si nada más abrir las páginas dobles donde se puede observar la promoción dan ganas de tirar las hojas a la papelera más cercana porque te empieza a picar todo el cuerpo...
El mal gusto es algo innato en la sociedad actual. La colección de La Voz es tan desagradable a la ética y la armonía como salir el sábado con chándal, llevar pendientes agitanados, rabillos pintados en los ojos, decir shosho al final de cada frase, lucir musculitos con camisetas de tirantes al estilo baloncestístico (qué pestilencia), ver televisiones locales cutres o flipar con poemas de Bécquer.
Esperemos que el jurado del Concurso Oficial de Agrupaciones Carnavalescas de Cádiz no tenga mal gusto esta noche a la hora de elegir a los finalistas. Viendo cómo se las gasta, parece que apostará por lo de siempre, sin resquicio para renovar el COAC. Lo decía Vera Luque hace varios días, tras haber sido denostado en favor de momias y de cosas caducas (por cierto, mal gusto es también el tipo de la chirigota de Manolo Santander y esa nariz al fondo, me recuerda al culo de la agrupación 100% de raza mora y nadie se ha metido con el Santander...).
Puede ocurrir que volvamos a tener lo de siempre y las apuestas de Kike Remolino o Juan Carlos Aragón se queden fuera para dar paso a muermos oliendo a naftalina. Veremos. Por lo pronto, suerte (que la van a necesitar) para las agrupaciones que cantan hoy, especialmente para La banda del capitán Veneno y a su octavilla Carlos Mera (en la foto), un buen tío que, junto con sus compañeros comparsistas, tendrán que darlo todo esta noche.
martes, 29 de enero de 2008
¿Ahora pedís perdón?
Israel ha pedido perdón oficialmente a los Beatles por prohibirles el concierto que en su día se anunció hace 43 años. Por entonces, los gobernantes judíos consideraron que aquellos cuatro chicos melenudos y con ese ritmo rockero eran poco menos que enviados del diablo y tenían serias posibilidades de corromper a los jóvenes del estado hebrero. Ahora, los judíos han sacado tiempo para pedir disculpas entre lo muy ocupados que están en bombardear a los palestinos y arrebatarles su tierra, dar patadas a los derechos humanos, aislar a niños y mujeres y dejar sus hospitales sin energía eléctrica e ir de la manita de Estados Unidos en el Age Of Empires particular en el que ambos han convertido el mundo. Ya no sé a quién van a pedir perdón a estas alturas de la película, al parecer a los Beatles que quedan vivos, y quieren además que Ringo y Paul ofrezcan un concierto en Israel para resarcir lo sucedido en aquél momento. A buenas horas mangas verdes.
Según las noticias debatidas en las últimas horas en emisoras de radio y páginas publicadas en los periódicos, Israel está dispuesta a gastarse una pasta en organizar un concierto con los dos Beatles aún operativos sin escatimar recursos. En escasas ocasiones he visto a los judíos tener mala conciencia, porque ni eso siquiera, y parece que en el caso de la famosa banda de Liverpool les ha entrado.
Es una buena oportuna de Ringo y Paul para darles una patada a esta gentuza. Es el momento ideal para decirles que, o dejan de torturar al pueblo palestino, y van a tener que poner un disco de vinilo en una gramola si quieren escuchar Help!Lo que aún no entiendo, entre tantos desmanes que comete Israel, es porqué este país está en Eurovisión si no es europeo, porqué sus equipos de diferentes deportes participan en competiciones europeas si, insisto, no lo son, porqué no se les veta además por sus actitudes contra la comunidad internacional cuando sí se lleva a efecto contra otros estados, y algo que me indigna: cómo es posible que algunos supermercados de al lado de mi casa me vendan patatas cuya procedencia es israelita, cuando en Conil se plantan unas papas que saben a gloria.
Estoy harto de los judíos. Lo siento. No soy antisemita, es más, yo no soy anti nada, pero estoy cansado de su lloriqueo internacional basado en las persecuciones históricas de las que han sido objeto cuando basta repasar la historia y contemplar la actual desde una perspectiva objetiva para comprobar los millones de víctimas que han provocado tanto siendo pueblo desde el punto de vista de su raza como estado desde la década de los cuarenta.
Y como estamos en Carnaval, ya en una brillante letra de Juan Carlos Aragón de 'Los ángeles caídos' (2002), el autor se preguntaba cosas como esta...: "Oh pueblo americano, judío y luterano, en nombre de qué dioses reventáis las voces de los palestinos...".
viernes, 25 de enero de 2008
"Eso es poder"
Hay líneas en las que resulta difícil mantener el equilibrio. Entre ellas está la de la perspectiva trenzada con la inteligencia.No frunzas el ceño, es fácilmente reconocible en nuestro interior. Se da en los casos en los es necesario mandar a alguien al carajo, decirle cuatro verdades a quienes te tocan los cojones o hacen daño a personas y entidades a las que quieres.
Hay gentuza convertida en chinitas de zapato que, aun sin poder para desestabilizar porque apenas significan nada ni nadie, no dejan de provocarte una minúscula herida en el dedo meñique de alguno de los pies. Así que siempre es bueno descalzarte para expulsar la puñetera piedra. Pero como se pega al zapato, tienes que meter la mano, y entonces te encuentras que al final puede oler a pie y remover los olores ya se sabe... Es más, ¿y si el hedor no es tuyo y ni te explicas cómo ha llegado hasta tus peanas? Está claro, la chinita apesta. También sirven para apestar, eso sí. ¿O no era eso lo que me contaron?
Caminar sobre la línea de la inteligencia es no subestimar el poder de la indiferencia y dar el golpe de gracia donde debe darse, no practicar lo del elefante en la cacharrería por mucho que te jodan las cosas que se dicen y se leen, que sin que ustedes se den cuenta, resulta que también las leen los demás, las moscas atraídas por la peste del zapato y la mierda y se regocijan entre tanta bronca. Pero debe ser la edad por una parte, la falta de cerebro por otra, la mala leche en ambas y el carajotismo en general lo que provoca que, finalmente, la gente no se percate de lo que pueden llegar a perjudicar.
Cuando yo escuchaba el ‘disco del penitente verde’ no habían ni nacido, y desde tiempos remotos mi padre me enseñó a no hacer daño a lo que se ama. No he seguido las enseñanzas de mi progenitor en alguna que otra ocasión, sobre todo en el caso de las mujeres, pero como también a mí me han jodido, pues equis en la quiniela. Pero en 39 años de edad cumplidos el pasado 9 de enero, hay cosas e instituciones que me han acompañado desde que nací. Mi padre me habló de una de ellas hace ocho meses, y quiso compartirla con terceros. En ocasiones soy tan orgulloso que me creí que me estaba leyendo aquel discurso magistral sólo a mí, como las lecciones en EGB que trataba de meterme en la cabeza. Otros se la perdieron, pero quieren ocupar unos sitios que no les corresponden, porque para eso tienen que comer muchos picos. O escuchar a los que saben. O ir a los actos. A las reuniones. O ir por derecho. Si se quiere estar de verdad.
Yo aconsejo siempre ser inteligente, guardar el equilibrio, aunque te cueste, sobre todo cuando tienes poder. En ‘La lista de Shindler’, el protagonista del gran filme de Steven Spielberg mantiene una charla con el sanguinario Amon Goeth. Para culminar la conversación, Oscar Schindler le espeta: “Un hombre roba algo, le conducen ante el emperador, se hecha al suelo ante él, le implora clemencia... él sabe que va a morir, pero el emperador le perdona la vida, a ese miserable y deja que se vaya. Eso es poder, Amón... eso es poder. Yo…te perdono”.
El poder está en manos de quienes lo tienen en silencio, y sus actos son infinitos. El resto chilla en la calle o se queda en el zapato. O toman de chupa de dómine al máximo dirigente. Suerte tienen de que algunos mandatarios no son como yo, que pegaba dos puñetazos en la mesa y me duraban 0,2 segundos en un cónclave en el que se les ve el odio y la niñería en los ojos. Pueden aspirar a tener el poder, pero para conseguirlo legítimamente hay que reunir cuatro condiciones indispensables: heterogeneidad de grupo, valía personal, fidelidad y capacidad de sacrificio. Lo primero me suena a risa cuando los veo, lo segundo ni me paro a estudiarlo, lo tercero es imposible entre tanto cambio de opinión y lo cuarto es la virtud más alejada de sus nombres.Así que a joderse. Y a seguir siendo torpes. Ya aprenderéis.
¿Alguien ha entendido algo? Pues eso.
Hay gentuza convertida en chinitas de zapato que, aun sin poder para desestabilizar porque apenas significan nada ni nadie, no dejan de provocarte una minúscula herida en el dedo meñique de alguno de los pies. Así que siempre es bueno descalzarte para expulsar la puñetera piedra. Pero como se pega al zapato, tienes que meter la mano, y entonces te encuentras que al final puede oler a pie y remover los olores ya se sabe... Es más, ¿y si el hedor no es tuyo y ni te explicas cómo ha llegado hasta tus peanas? Está claro, la chinita apesta. También sirven para apestar, eso sí. ¿O no era eso lo que me contaron?
Caminar sobre la línea de la inteligencia es no subestimar el poder de la indiferencia y dar el golpe de gracia donde debe darse, no practicar lo del elefante en la cacharrería por mucho que te jodan las cosas que se dicen y se leen, que sin que ustedes se den cuenta, resulta que también las leen los demás, las moscas atraídas por la peste del zapato y la mierda y se regocijan entre tanta bronca. Pero debe ser la edad por una parte, la falta de cerebro por otra, la mala leche en ambas y el carajotismo en general lo que provoca que, finalmente, la gente no se percate de lo que pueden llegar a perjudicar.
Cuando yo escuchaba el ‘disco del penitente verde’ no habían ni nacido, y desde tiempos remotos mi padre me enseñó a no hacer daño a lo que se ama. No he seguido las enseñanzas de mi progenitor en alguna que otra ocasión, sobre todo en el caso de las mujeres, pero como también a mí me han jodido, pues equis en la quiniela. Pero en 39 años de edad cumplidos el pasado 9 de enero, hay cosas e instituciones que me han acompañado desde que nací. Mi padre me habló de una de ellas hace ocho meses, y quiso compartirla con terceros. En ocasiones soy tan orgulloso que me creí que me estaba leyendo aquel discurso magistral sólo a mí, como las lecciones en EGB que trataba de meterme en la cabeza. Otros se la perdieron, pero quieren ocupar unos sitios que no les corresponden, porque para eso tienen que comer muchos picos. O escuchar a los que saben. O ir a los actos. A las reuniones. O ir por derecho. Si se quiere estar de verdad.
Yo aconsejo siempre ser inteligente, guardar el equilibrio, aunque te cueste, sobre todo cuando tienes poder. En ‘La lista de Shindler’, el protagonista del gran filme de Steven Spielberg mantiene una charla con el sanguinario Amon Goeth. Para culminar la conversación, Oscar Schindler le espeta: “Un hombre roba algo, le conducen ante el emperador, se hecha al suelo ante él, le implora clemencia... él sabe que va a morir, pero el emperador le perdona la vida, a ese miserable y deja que se vaya. Eso es poder, Amón... eso es poder. Yo…te perdono”.
El poder está en manos de quienes lo tienen en silencio, y sus actos son infinitos. El resto chilla en la calle o se queda en el zapato. O toman de chupa de dómine al máximo dirigente. Suerte tienen de que algunos mandatarios no son como yo, que pegaba dos puñetazos en la mesa y me duraban 0,2 segundos en un cónclave en el que se les ve el odio y la niñería en los ojos. Pueden aspirar a tener el poder, pero para conseguirlo legítimamente hay que reunir cuatro condiciones indispensables: heterogeneidad de grupo, valía personal, fidelidad y capacidad de sacrificio. Lo primero me suena a risa cuando los veo, lo segundo ni me paro a estudiarlo, lo tercero es imposible entre tanto cambio de opinión y lo cuarto es la virtud más alejada de sus nombres.Así que a joderse. Y a seguir siendo torpes. Ya aprenderéis.
¿Alguien ha entendido algo? Pues eso.
miércoles, 23 de enero de 2008
'Croquette fatale'
Larga noche la del otro día. Ni siquiera una copa de buen brandy me sirvió para calmar mis ansias de encontrar respuesta a lo que contemplé apenas varias horas antes.
Pasé por la esquina del freidor. Como yo soy educado, tanto es así que incluso saludo a los/las que no lo merecen porque al fin y al cabo el “Buenos días” o el escueto “Hola” son como el bautismo –un evento social más que un acto de fe-, siempre desvío mi vista hacia el escaparate para enviar una mirada cómplice a los chocos y a las tajás de bienmesabe.
Pero aquella noche vi algo que me horrorizó. Tras un cristal con estratégicos salpicones de pringue, creí no ver absolutamente nada en la bandeja donde se depositan los citados manjares; apenas unas mijitas de esas que tanto agradan llevarse a la boca tras terminarse el papelón de pescado y un trapo amenazador, aguardando pacientemente casi en la esquina con el mostrador a ejecutar su trabajo al finalizar la jornada.
Allí estaba ella. Acurrucada en la esquina izquierda, con su rostro pegado al cristal y el cuerpo curvado, me detuve ante ella, pues un cúmulo de sentimientos atenazaron mi mente en ese instante en el que comprendí su dolor, el sufrimiento al sentirse despechada o lo que es aún peor, inútil...
Aquella croqueta tuvo que ser espectacular minutos antes. En este caso estoy seguro de que era orgullosa, esperando ser contemplada y recogida en el grisáceo papel acucuruchado, se pavoneaba sobre el resto de compañeras e incluso era observada con recelo por los rabos de chocos y las sosas pescadillas. Curvas perfectas, caliente como recién venida a la vida, perfectamente envuelta en su ropa bien ajustada tras la vivencia de la freidora, aquella croqueta se había convertido en una sombra de lo que fue.
La mala suerte se cebó en ella y, de pavonearse entre todas y ser objeto de miradas lascivas tras el cristal, se quedó finalmente abandonada y sola, para vestir santos, sin que hubiera hecho méritos para algo tan luctuoso.
Había perdido el brillo del aceite recién rezumado, la voluptuosidad de la calidez, había sido además apartada hasta una ignota esquina donde algún que otro golpe de paleta recogedora asestado por una mano masculina fría y calculadora le había creado algún moratón en el centro para dejarla escorada. Parecía morirse lentamente con su carita pegada al cristal, consciente de que nadie entraría a salvarla, a rogar por ella y a disfrutar de sus interioridades,…
No puedo quitarme de la mente la imagen de esa croqueta. Su lenta agonía la condujo indefectiblemente al cubo de la basura, aunque no quise verlo. Estuve a punto de salvarla, retrotrayendo mi mente a un imaginario paraíso donde ella era una reina, quizás una ‘croquette fatale’ de esas que haces que pierdas la cabeza… Pero ya hace años que perdí mi condición de héroe de freidores por culpa de las amenazantes moyas y mi temor a no cumplir con ella como antaño sí lo hice con las que tuve en mis manos, en mi boca. Por eso, jamás sabré de tus interioridades, si tu cuerpo era de jamón o de merluza…
Descansa en paz.
Pasé por la esquina del freidor. Como yo soy educado, tanto es así que incluso saludo a los/las que no lo merecen porque al fin y al cabo el “Buenos días” o el escueto “Hola” son como el bautismo –un evento social más que un acto de fe-, siempre desvío mi vista hacia el escaparate para enviar una mirada cómplice a los chocos y a las tajás de bienmesabe.
Pero aquella noche vi algo que me horrorizó. Tras un cristal con estratégicos salpicones de pringue, creí no ver absolutamente nada en la bandeja donde se depositan los citados manjares; apenas unas mijitas de esas que tanto agradan llevarse a la boca tras terminarse el papelón de pescado y un trapo amenazador, aguardando pacientemente casi en la esquina con el mostrador a ejecutar su trabajo al finalizar la jornada.
Allí estaba ella. Acurrucada en la esquina izquierda, con su rostro pegado al cristal y el cuerpo curvado, me detuve ante ella, pues un cúmulo de sentimientos atenazaron mi mente en ese instante en el que comprendí su dolor, el sufrimiento al sentirse despechada o lo que es aún peor, inútil...
Aquella croqueta tuvo que ser espectacular minutos antes. En este caso estoy seguro de que era orgullosa, esperando ser contemplada y recogida en el grisáceo papel acucuruchado, se pavoneaba sobre el resto de compañeras e incluso era observada con recelo por los rabos de chocos y las sosas pescadillas. Curvas perfectas, caliente como recién venida a la vida, perfectamente envuelta en su ropa bien ajustada tras la vivencia de la freidora, aquella croqueta se había convertido en una sombra de lo que fue.
La mala suerte se cebó en ella y, de pavonearse entre todas y ser objeto de miradas lascivas tras el cristal, se quedó finalmente abandonada y sola, para vestir santos, sin que hubiera hecho méritos para algo tan luctuoso.
Había perdido el brillo del aceite recién rezumado, la voluptuosidad de la calidez, había sido además apartada hasta una ignota esquina donde algún que otro golpe de paleta recogedora asestado por una mano masculina fría y calculadora le había creado algún moratón en el centro para dejarla escorada. Parecía morirse lentamente con su carita pegada al cristal, consciente de que nadie entraría a salvarla, a rogar por ella y a disfrutar de sus interioridades,…
No puedo quitarme de la mente la imagen de esa croqueta. Su lenta agonía la condujo indefectiblemente al cubo de la basura, aunque no quise verlo. Estuve a punto de salvarla, retrotrayendo mi mente a un imaginario paraíso donde ella era una reina, quizás una ‘croquette fatale’ de esas que haces que pierdas la cabeza… Pero ya hace años que perdí mi condición de héroe de freidores por culpa de las amenazantes moyas y mi temor a no cumplir con ella como antaño sí lo hice con las que tuve en mis manos, en mi boca. Por eso, jamás sabré de tus interioridades, si tu cuerpo era de jamón o de merluza…
Descansa en paz.
martes, 22 de enero de 2008
Vamos aclarándonos
Ya han cantado todas las comparsas susceptibles de estar entre las elegidas para la final del COAC. Hay cosas claras, vamos a resumirlas para no cansar al personal...
1. Tovar y Subiela se pegan el carajazo este año. No se puede venir al Falla con ese tipo, vestir a estos comparsistas con pelucas del Millonario a lo maradona y traer ese aburridísimo popurrí. De los quintos no bajarán, fijo.
2. El grupo de Juan Carlos Aragón ha visto mermadas sus cualidades vocales. Las bajas se notan demasiado este año, daños colaterales. Pasodoble precioso musicalmente hablando y presentación que espero la canten mejor en semifinales. La foto es JCA cantando en la noche del lunes (Cata Zambrano, Información Cádiz). Buen tipo. No Juan Carlos, sino la indumentaria de la comparsa.
3. El Piojo y algún otro pega menos con Quiñones que yo vestido de monje budista o de candidato del PP a cualquier cargo. Cuando pase el Carnaval, habrá muchas transacciones nuevamente. No obstante, El mercado de las maravillas la veo en la final, a pesar de que suena muy bien pero más antiguo 'quer carajo'. (Esas palabras en los repertorios, por favor, como "febrerillo",... Qué horror).
4. Los mendas lerendas son agradables de escuchar. Vale. Hasta el año que viene.
5. Cuidadín con La comparsa de Momo. Lo mejor hasta ahora sobre el escenario, vaya presentación y popurrí, de los pasodobles para qué vamos a decir nada... Pero sus letras son incómodas y políticamente incorrectas. Voces portentosas, aunque estaría mejor ahorrarse algún grito. Para mí, cuando cantaron, tenían en la frente la palabra 'perdedores' como la vi escrita en 'Los Inmortales' de JCA en su día. Pero han cantado ya el resto de las agrupaciones y no las veo mejores, así que de eso se aprovecharán. En estos momentos es el primer premio, según mi torpe entender.
6. Los gitanos de El Puerto, Pedro Romero y otros no me interesan lo más mínimo. Al jurado tampoco.
7. Resumamos: si en 2007 el nivel estaba regular, este año la cosa no va a mejor. Veremos lo que queda de concurso, que aún es mucho. Pero las músicas ya están ahí, no hay más, eso es lo que tenemos para deleitarnos los oídos.
Aprovecho para reiterar mi indignación ante el mamarracho de proceso de venta de entradas para el Concurso. Y para preguntarle al Ayuntamiento que cuándo coño va a quitar los arbolitos de Navidad de los adornos de luces de la Avenida. Y para desear lo mejor a mis colegas Sánchez Reyes y Vera Luque, que este miércoles la liará. "Ya estamos en capilla", me decía ayer en el teatro. Pues eso. A sacar el paso con jesusitos de mi vida, picha mía.
lunes, 21 de enero de 2008
El perfumista
Este fin de semana me he escapado a Córdoba con unos extraordinarios amigos que han institucionalizado unos encuentros ineludibles tras aquel inolvidable viaje a Italia. Entre los numerosos momentos de satisfacción (sobre todo en los restaurantes de la capital califal, lugares realmente maravillosos tanto en su fisonomía como en el ámbito culinario), fue especialmente curioso el rato que pasamos con un perfumista. Sí, efectivamente, estos alquimistas del olor aún existen.
Paco nos vio y nos invitó a entrar en un precioso patio cordobés para confesarnos su secreto a voces en esta ciudad: tiene una pequeña habitación donde vende una mercancía que envuelve primorosamente en papel de regalo y previamente en cajas diseñadas por un amigo suyo. Dentro, tarros de perfume de varios olores: mandarina, jazmín, azahar,… Él los hace, destilando la materia y con sus fórmulas magistrales, en un taller que comparte con su compañero de viaje empresarial.
Paco, que vende los tarros de colonias maravillosas que nos dio a probar a 20 euros, tiene una historia digna de película. Una madrugada llevaba ya varias copas en la barra de un bar cuando observó a escasos metros a un individuo de apariencia hundida que consumía alcohol en grandes cantidades. Se acercó a él hasta que entablaron conversación. Se trataba de un empresario químico que acababa de entrar en la ruina al quebrar su empresa. De ahogar las mutuas salió una idea: ¿Y si Paco aprovechaba las instalaciones de este empresario y el poco dinero que ambos podían reunir, además de los conocimientos que desde pequeño había adquirido de forma autodidacta mezclando flores, alcohol, etc. y creaban unos perfumes para venderlos?
Dicho y hecho. Eso fue hace casi un año. Ahora han salido a flote, venden mucho en Córdoba y el pequeño local donde Paco ofrece sus perfumes es para que lo veáis.
Esta historia me la contó durante un rato que estuvimos conversando rodeados de sus perfumes. Le dije que entonces era perfumista, como la famosa película, a lo que añadió: “Soy alquimista perfumista”.
Ahí lo tienen, en la foto, mostrando los envases ya envueltos para regalo a nuestro grupo, y con su delantal. Para los que vieron el filme, ahora pueden contemplar de verdad cómo es un perfumista. Para los carnavaleros, curiosamente y tras la controversia de estos días, también pueden comprobar cómo un perfumista no va vestido a la usanza del desafortunado tipo de la comparsa de Tino Tovar y Ángel Subiela, ni tampoco precisamente Paco tiene pelos como los de esas pelucas de la agrupación que parecen las que vendía el Millonario simulando la pelambrera de Maradona.
Córdoba… Si Córdoba estuviera habitada por sevillanos, éstos ya hubieran ‘vendido’ al mundo todo lo precioso que es esta ciudad. Pero los cordobeses ‘venden’ poco lo bueno que tienen, les gusta ir a lo suyo, no competir y disfrutar de esa maravilla de ciudad que tienen en lugar de cacarear lo bonito que es la Torre del Oro o, como los gaditanos, afirmar qué preciosas son nuestras Puertas de Tierra. Admirable Córdoba, “lejana y sola”, como decía el poeta… Ni una cosa ni otra en realidad.
Paco nos vio y nos invitó a entrar en un precioso patio cordobés para confesarnos su secreto a voces en esta ciudad: tiene una pequeña habitación donde vende una mercancía que envuelve primorosamente en papel de regalo y previamente en cajas diseñadas por un amigo suyo. Dentro, tarros de perfume de varios olores: mandarina, jazmín, azahar,… Él los hace, destilando la materia y con sus fórmulas magistrales, en un taller que comparte con su compañero de viaje empresarial.
Paco, que vende los tarros de colonias maravillosas que nos dio a probar a 20 euros, tiene una historia digna de película. Una madrugada llevaba ya varias copas en la barra de un bar cuando observó a escasos metros a un individuo de apariencia hundida que consumía alcohol en grandes cantidades. Se acercó a él hasta que entablaron conversación. Se trataba de un empresario químico que acababa de entrar en la ruina al quebrar su empresa. De ahogar las mutuas salió una idea: ¿Y si Paco aprovechaba las instalaciones de este empresario y el poco dinero que ambos podían reunir, además de los conocimientos que desde pequeño había adquirido de forma autodidacta mezclando flores, alcohol, etc. y creaban unos perfumes para venderlos?
Dicho y hecho. Eso fue hace casi un año. Ahora han salido a flote, venden mucho en Córdoba y el pequeño local donde Paco ofrece sus perfumes es para que lo veáis.
Esta historia me la contó durante un rato que estuvimos conversando rodeados de sus perfumes. Le dije que entonces era perfumista, como la famosa película, a lo que añadió: “Soy alquimista perfumista”.
Ahí lo tienen, en la foto, mostrando los envases ya envueltos para regalo a nuestro grupo, y con su delantal. Para los que vieron el filme, ahora pueden contemplar de verdad cómo es un perfumista. Para los carnavaleros, curiosamente y tras la controversia de estos días, también pueden comprobar cómo un perfumista no va vestido a la usanza del desafortunado tipo de la comparsa de Tino Tovar y Ángel Subiela, ni tampoco precisamente Paco tiene pelos como los de esas pelucas de la agrupación que parecen las que vendía el Millonario simulando la pelambrera de Maradona.
Córdoba… Si Córdoba estuviera habitada por sevillanos, éstos ya hubieran ‘vendido’ al mundo todo lo precioso que es esta ciudad. Pero los cordobeses ‘venden’ poco lo bueno que tienen, les gusta ir a lo suyo, no competir y disfrutar de esa maravilla de ciudad que tienen en lugar de cacarear lo bonito que es la Torre del Oro o, como los gaditanos, afirmar qué preciosas son nuestras Puertas de Tierra. Admirable Córdoba, “lejana y sola”, como decía el poeta… Ni una cosa ni otra en realidad.
viernes, 18 de enero de 2008
La carajotada del himno
Vamos a dejarnos de carajotadas. Si queremos que el himno de España tenga letra, algo que me da la impresión de que a los españoles les importa un rábano con bicho dentro, pues seamos consecuentes.
Vaya por delante que a mí me entusiasma lo que ahora llaman “chunda chunda”, porque no sé qué obligación tenemos de ponerle estrofas a las bellas notas que hasta los republicanos reconocemos que no vamos ahora a cambiar aunque llegara la III República. Porque si se trata de evitar facheríos, el himno de Riego era igual de patriótico o más que cualquiera de las letras que cantaban los ultras en los cuarenta años de dictadura.
Y es que me pregunto qué coño quieren que incluya un himno de un país. El alemán dice en su frase más conocida “Deutchsland, Deuthsland Uber Alles”, que quiere decir “Alemania, Alemania ante todo”; el francés que tanto pone cachondos a muchos porque para eso Francia es prototipo de libertad según dicen, ya saben que la palabra patria aparece nada más canturreemos el primer verso. Así que estas son las palabras típicas de un himno nacional, porque por mucho que queramos hacer algo moderno, ¿vamos a cantar una letra que diga cosas como “nuestro país en el que existen muchas tierras”, “Viva España, dividida pero unida con tu comunidad…” pon pon piiii piiii…..?
Si queremos himno, tendrá que presentar connotaciones patrióticas o palabras propias de este asunto. Si la propuesta que manejáramos comenzara diciendo “España, España ante todo” como el himno teutón, ya habríamos puesto al tipo que le han rechazado su letras de colega de Blas Piñar. Pero los alemanes lo dicen y no les pasa nada, no les entra urticaria ni complejos, y mira que los germanos lo han pasado mal en los últimos 60 años...
Y cuando tengamos himno oral, ¿lo traduciremos al catalán, al gallego, al vasco? Es el momento menos oportuno para perder el tiempo con carajotadas como esta. Yo propongo dos cosas, cualquiera de ellas válidas. O rescatamos el que escribió Pemán, que es precioso y fue manipulado por Franco, que para eso el escritor era gaditano y podemos recuperar el original porque la familia lo tiene, o se lo encargamos a Juan Carlos Aragón. Eso sí que sería un pelotazo.
Ah, por cierto, Joaquín Sabina ha propuesto algunos borradores de letras para el himno, ¿lo sabíais? Allán van…
"Ciudadanos, en guerra por la paz y la diosa razón mano en el corazón. Ciudadanos, ni súbditos ni amos ni resignación ni carne de cañón. Pan amasado con fe y dignidad no hay nada más sagrado que la libertad".
Borrador 2: "Ciudadanos, ni héroes ni villanos, hijos del ayer, hay tanto por hacer. Ciudadanos, tan fieramente humanos, tan paisanos del hermano de Babel. Alta montaña con puerto de mar clave de sol España atrévete a soñar".
Vaya por delante que a mí me entusiasma lo que ahora llaman “chunda chunda”, porque no sé qué obligación tenemos de ponerle estrofas a las bellas notas que hasta los republicanos reconocemos que no vamos ahora a cambiar aunque llegara la III República. Porque si se trata de evitar facheríos, el himno de Riego era igual de patriótico o más que cualquiera de las letras que cantaban los ultras en los cuarenta años de dictadura.
Y es que me pregunto qué coño quieren que incluya un himno de un país. El alemán dice en su frase más conocida “Deutchsland, Deuthsland Uber Alles”, que quiere decir “Alemania, Alemania ante todo”; el francés que tanto pone cachondos a muchos porque para eso Francia es prototipo de libertad según dicen, ya saben que la palabra patria aparece nada más canturreemos el primer verso. Así que estas son las palabras típicas de un himno nacional, porque por mucho que queramos hacer algo moderno, ¿vamos a cantar una letra que diga cosas como “nuestro país en el que existen muchas tierras”, “Viva España, dividida pero unida con tu comunidad…” pon pon piiii piiii…..?
Si queremos himno, tendrá que presentar connotaciones patrióticas o palabras propias de este asunto. Si la propuesta que manejáramos comenzara diciendo “España, España ante todo” como el himno teutón, ya habríamos puesto al tipo que le han rechazado su letras de colega de Blas Piñar. Pero los alemanes lo dicen y no les pasa nada, no les entra urticaria ni complejos, y mira que los germanos lo han pasado mal en los últimos 60 años...
Y cuando tengamos himno oral, ¿lo traduciremos al catalán, al gallego, al vasco? Es el momento menos oportuno para perder el tiempo con carajotadas como esta. Yo propongo dos cosas, cualquiera de ellas válidas. O rescatamos el que escribió Pemán, que es precioso y fue manipulado por Franco, que para eso el escritor era gaditano y podemos recuperar el original porque la familia lo tiene, o se lo encargamos a Juan Carlos Aragón. Eso sí que sería un pelotazo.
Ah, por cierto, Joaquín Sabina ha propuesto algunos borradores de letras para el himno, ¿lo sabíais? Allán van…
"Ciudadanos, en guerra por la paz y la diosa razón mano en el corazón. Ciudadanos, ni súbditos ni amos ni resignación ni carne de cañón. Pan amasado con fe y dignidad no hay nada más sagrado que la libertad".
Borrador 2: "Ciudadanos, ni héroes ni villanos, hijos del ayer, hay tanto por hacer. Ciudadanos, tan fieramente humanos, tan paisanos del hermano de Babel. Alta montaña con puerto de mar clave de sol España atrévete a soñar".
jueves, 17 de enero de 2008
Grande Bardem
No sé si va camino de ser uno de los grandes por sus interpretaciones o por su forma de ser. A Javier Bardem hay que felicitarlo por el Globo de Oro y algunos premios más, así como otras nominaciones (incluido el Bafta, que es el Oscar de los ingleses).
Es un brillante actor, que utiliza acertadamente su expresividad facial y sus ojos para decir mucho en los papeles que encarna en su carrera. Su voz le pierde un poco, pero también le sucedía lo mismo a Clark Gable o Humphrey Bogart y nadie dijo nada.
Yo lo conocí en 1993, cuando se estrenó la película Boca a boca en el Festival de Sitges, con una Aitana Sánchez Gijón guapísima como compañera en esta divertida comedia. Hicimos buenas migas en aquella cafetería del Meliá Gran Sitges, nos fotografiamos con resultados como el que veis (sí, reíos de mis pintas, pero estamos hablando de hace 14 años) y me he tomado con él algunas cervezas en Sevilla, ciudad que visita con mucha frecuencia sin que mucha gente lo sepa.
Es un buen tipo. Le gusta más una caña de birra que un premio, una tapa de jamón que una gala aburrida y tiene un reducido grupo de amigos fieles con los que se escapa mucho a Cádiz. Pasa de casi todo, pero le puede su pasión por Penélope Cruz, su amor no confesado desde que rodaron Jamón jamón a las órdenes de Bigas Luna. Penélope era demasiada pequeña en aquellos momentos como para muchas cosas serias, pero se quedó prendado de ella y aún lo está. Espero que no se enfade porque yo lo diga tal y como me lo dijo él. No creo que me lea, pero nunca se sabe...
Es un brillante actor, que utiliza acertadamente su expresividad facial y sus ojos para decir mucho en los papeles que encarna en su carrera. Su voz le pierde un poco, pero también le sucedía lo mismo a Clark Gable o Humphrey Bogart y nadie dijo nada.
Yo lo conocí en 1993, cuando se estrenó la película Boca a boca en el Festival de Sitges, con una Aitana Sánchez Gijón guapísima como compañera en esta divertida comedia. Hicimos buenas migas en aquella cafetería del Meliá Gran Sitges, nos fotografiamos con resultados como el que veis (sí, reíos de mis pintas, pero estamos hablando de hace 14 años) y me he tomado con él algunas cervezas en Sevilla, ciudad que visita con mucha frecuencia sin que mucha gente lo sepa.
Es un buen tipo. Le gusta más una caña de birra que un premio, una tapa de jamón que una gala aburrida y tiene un reducido grupo de amigos fieles con los que se escapa mucho a Cádiz. Pasa de casi todo, pero le puede su pasión por Penélope Cruz, su amor no confesado desde que rodaron Jamón jamón a las órdenes de Bigas Luna. Penélope era demasiada pequeña en aquellos momentos como para muchas cosas serias, pero se quedó prendado de ella y aún lo está. Espero que no se enfade porque yo lo diga tal y como me lo dijo él. No creo que me lea, pero nunca se sabe...
miércoles, 16 de enero de 2008
Calcetines de raquetas
Decía una agrupación carnavalesca en sus letras hace algunos días que los calcetines de raquetas se están perdiendo. Cuánta razón lleva.
Me siento muy compungido por esta circunstancia. Los calcetines blancos de antaño los lucíamos en nuestras piernas durante la gimnasia en el colegio como si lleváramos las medias nike del Barsa, y los dos modelos fundamentales vienen corriendo serio peligro de desaparecer. Al calcetín blanco le colocó algún diseñador vanguardista dos líneas, una roja y otra azul, haciendo un elegante juego de colores gabachos que ni el mismo McEnroe llevaba.
Las dos rayitas evolucionaron a la modernidad del dibujito, y aunque siempre han permanecido como residuales, dio lugar al calcetín de raquetas. Aquello fue una revolución. Yo tengo aún mis preservativos de pies arraquetados, si alguien lo duda aquí está la foto. Los uso para dormir, claro, o después del pediluvio nocturno para estar en el sofá ‘derramao’ varias horas viendo la tele, nada de hacer deporte, que eso es muy malo. Pero me resistí a tirarlos a la basura y ahora los considero como extensiones de mis pies, como elementos fundamentales de mi hogar, trato que no saquen pelusas para evitar su erosión y los lavo a mano cuando puedo para su mejor conservación. Si se sale algún hilito, los vuelvo a coser o si no tiene remedio, los corto con primor. Pero los calcetines de raquetas no pueden perderse. Si hace frío y me pongo dos pares de calcetines para dormir, de manera que no te dejen mover los deditos siquiera, las raquetas siempre están sobre los otros anónimos calcetines, prevaleciendo, en lugar privilegiado…
No podemos permitir que los calcetines de raquetas corran la misma suerte que los bañadores meyba, el zinzano, la mirinda, el Seat Ritmo –preferentemente color butano-, las muñecas de Marín (que por cierto, esta Navidad sufrí un Belén en Jerez en el que se podían ver dos ejemplares vestidos de bodegueros (¡!) o las cintas de video beta. Desempolvad vuestros cajones y armarios y buscad afanosamente en bolsas perdidas de ropa antigua. Cuando menos lo esperes, aparecerá el calcetín de raqueta, y dadle el lugar que se merece, por historia y tronío.
Me siento muy compungido por esta circunstancia. Los calcetines blancos de antaño los lucíamos en nuestras piernas durante la gimnasia en el colegio como si lleváramos las medias nike del Barsa, y los dos modelos fundamentales vienen corriendo serio peligro de desaparecer. Al calcetín blanco le colocó algún diseñador vanguardista dos líneas, una roja y otra azul, haciendo un elegante juego de colores gabachos que ni el mismo McEnroe llevaba.
Las dos rayitas evolucionaron a la modernidad del dibujito, y aunque siempre han permanecido como residuales, dio lugar al calcetín de raquetas. Aquello fue una revolución. Yo tengo aún mis preservativos de pies arraquetados, si alguien lo duda aquí está la foto. Los uso para dormir, claro, o después del pediluvio nocturno para estar en el sofá ‘derramao’ varias horas viendo la tele, nada de hacer deporte, que eso es muy malo. Pero me resistí a tirarlos a la basura y ahora los considero como extensiones de mis pies, como elementos fundamentales de mi hogar, trato que no saquen pelusas para evitar su erosión y los lavo a mano cuando puedo para su mejor conservación. Si se sale algún hilito, los vuelvo a coser o si no tiene remedio, los corto con primor. Pero los calcetines de raquetas no pueden perderse. Si hace frío y me pongo dos pares de calcetines para dormir, de manera que no te dejen mover los deditos siquiera, las raquetas siempre están sobre los otros anónimos calcetines, prevaleciendo, en lugar privilegiado…
No podemos permitir que los calcetines de raquetas corran la misma suerte que los bañadores meyba, el zinzano, la mirinda, el Seat Ritmo –preferentemente color butano-, las muñecas de Marín (que por cierto, esta Navidad sufrí un Belén en Jerez en el que se podían ver dos ejemplares vestidos de bodegueros (¡!) o las cintas de video beta. Desempolvad vuestros cajones y armarios y buscad afanosamente en bolsas perdidas de ropa antigua. Cuando menos lo esperes, aparecerá el calcetín de raqueta, y dadle el lugar que se merece, por historia y tronío.
domingo, 13 de enero de 2008
¿Pestiños en Carnaval?
A mí los pestiños me parecen una cosa gloriosa. Pertenecen a ese tipo de género de pastosidades orgásmicas que deleitan el paladar en determinadas fechas, en el que se incluyen las torrijas de Semana Santa (especialmente las de La Campana de Sevilla y alguna hecha en Chiclana), los roscos también propios de esta fecha o los algodones dulces de las ferias.
Lo que no me entra en la cabeza y dudo que lo haga a estas alturas es qué coño pinta esa masa llena de miel con bolitas -de la que nos hemos hemos hartado en estos pasados días- para abrir una fiesta como el Carnaval. A algún lumbrera, que le salió la jugada bien por el mal gusto que existe en Cádiz a veces, se le ocurrió inaugurar las citas gastronómicas carnavalescas gaditanas repartiendo pestiños en plan agonía, antes de que nadie diera 'de gratis' las viandas por las que la gente se empuja en las barras de Cruzcampo mientras los zapatos ya están llenos de porquería.
Esa oreja de viejo que es el pestiño tiene de carnavalesco lo que Zaplana tiene de bolchevique. No sé a qué viene ese dulce en una noche de sábado carnavalesca, porque vamos a ver,... Independientemente de que no pegue ni estética ni visualmente ni como elemento de la carnestolenda ni dispendio porque es barato de hacer, ¿con qué se echa para abajo en el gaznate? A ustedes les dan un pestiño enservilletado que al pegarle el bocado te tienes que comer el papel que sirve de protección de las manos porque no hay cojones de separarlo de la miel. ¿Y qué se pide de bebestible? No me vayan a decir que no se engullen nada porque no hay quien tenga huevos de meterse eso sin un líquido que lo empuje. Si le dan a la cerveza, ambas cosas saben repugnantes. Si prueban con el cubata, no digamos nada cuando se observa el vaso y en lo que resta del Barceló cola aparece una asquerosa capa de pringue similar a la orilla de la playa Victoria los domingos en agosto. Si beben fino, se les soltará el vientre, fijo. Y si le dan al agua, los pestiños esponjarán en el estómago, se les hará una masa informe y las consecuencias pueden ser trágicas para lo que queda de noche.
Dicen que la gente bebe anís. Es decir, que en Carnaval tengo que comer pestiños y anís, lo mismo que días antes en Navidad, pero en la calle con seis grados en lugar de mi casa. Pues como que no me convence, oiga...
Otra cosa similar son los erizos. No son tan impropios como los pestiños, pero eso sí, más vale comérselos sin mirar, algo así como cuando la borrachera nos hace terminar esa noche en la cama con alguien más feo que pegarle a un padre con un calcetín sudado pero la llamada de la naturaleza resulta ineludible. Lo malo es que el erizo, cuando se degusta, tampoco te deja una sensación postsexual como la del ejemplo que hemos utilizado, porque un erizo, aparte de un bicho muy feo, es como pegarle un lamentón (otra vez) a la orilla de la Victoria un domingo, sabe a arena, un poco de caca y ligero regusto a lejano marisco rancio.
En fin, que cuando repartan langostinos, gambas o jamón a discreción, pues como que me apuntaré a estas degustaciones, mientras ocupo ya el sitio para ver en la tele las sesiones del COAC y ya me iré a la calle en su momento adecuado.
Foto: dos prototipos semiangangos de Cádiz, dándole al pestiño pegado enservilletado.
Lo que no me entra en la cabeza y dudo que lo haga a estas alturas es qué coño pinta esa masa llena de miel con bolitas -de la que nos hemos hemos hartado en estos pasados días- para abrir una fiesta como el Carnaval. A algún lumbrera, que le salió la jugada bien por el mal gusto que existe en Cádiz a veces, se le ocurrió inaugurar las citas gastronómicas carnavalescas gaditanas repartiendo pestiños en plan agonía, antes de que nadie diera 'de gratis' las viandas por las que la gente se empuja en las barras de Cruzcampo mientras los zapatos ya están llenos de porquería.
Esa oreja de viejo que es el pestiño tiene de carnavalesco lo que Zaplana tiene de bolchevique. No sé a qué viene ese dulce en una noche de sábado carnavalesca, porque vamos a ver,... Independientemente de que no pegue ni estética ni visualmente ni como elemento de la carnestolenda ni dispendio porque es barato de hacer, ¿con qué se echa para abajo en el gaznate? A ustedes les dan un pestiño enservilletado que al pegarle el bocado te tienes que comer el papel que sirve de protección de las manos porque no hay cojones de separarlo de la miel. ¿Y qué se pide de bebestible? No me vayan a decir que no se engullen nada porque no hay quien tenga huevos de meterse eso sin un líquido que lo empuje. Si le dan a la cerveza, ambas cosas saben repugnantes. Si prueban con el cubata, no digamos nada cuando se observa el vaso y en lo que resta del Barceló cola aparece una asquerosa capa de pringue similar a la orilla de la playa Victoria los domingos en agosto. Si beben fino, se les soltará el vientre, fijo. Y si le dan al agua, los pestiños esponjarán en el estómago, se les hará una masa informe y las consecuencias pueden ser trágicas para lo que queda de noche.
Dicen que la gente bebe anís. Es decir, que en Carnaval tengo que comer pestiños y anís, lo mismo que días antes en Navidad, pero en la calle con seis grados en lugar de mi casa. Pues como que no me convence, oiga...
Otra cosa similar son los erizos. No son tan impropios como los pestiños, pero eso sí, más vale comérselos sin mirar, algo así como cuando la borrachera nos hace terminar esa noche en la cama con alguien más feo que pegarle a un padre con un calcetín sudado pero la llamada de la naturaleza resulta ineludible. Lo malo es que el erizo, cuando se degusta, tampoco te deja una sensación postsexual como la del ejemplo que hemos utilizado, porque un erizo, aparte de un bicho muy feo, es como pegarle un lamentón (otra vez) a la orilla de la Victoria un domingo, sabe a arena, un poco de caca y ligero regusto a lejano marisco rancio.
En fin, que cuando repartan langostinos, gambas o jamón a discreción, pues como que me apuntaré a estas degustaciones, mientras ocupo ya el sitio para ver en la tele las sesiones del COAC y ya me iré a la calle en su momento adecuado.
Foto: dos prototipos semiangangos de Cádiz, dándole al pestiño pegado enservilletado.
viernes, 11 de enero de 2008
Diez preguntas sin respuesta
Dentro de este bochornoso espectáculo que está resultando la venta de entradas para el Concurso Oficial de Agrupaciones Carnavalescas de 2008, yo pregunto en mi ignorancia:
1.- ¿Cómo es posible que la venta de entradas por internet sólo se destine para un 20% del aforo?
2.- ¿Cómo es posible que se cuente con un portal que se satura a los pocos minutos de comenzar a funcionar?
3.- Si fue un hacker, ¿cómo es posible que un portal de garantías que vende entradas y comercia con números de tarjetas de crédito (www.interentradas.com) sea tan vulnerable?
4.- Si se quiere evitar la reventa, ¿por qué no se vende todo el papel por internet y en un servidor de calidad como se merece un evento seguido en toda España?
5.- ¿Por qué el concejal de Fiestas, el inepto de Vicente Sánchez, no da la cara y el Ayuntamiento y el Patronato del Carnaval no dan explicaciones claras y actualizadas de lo que sucede?
6.- A día de hoy, se puede observar por internet lo que veis en la fotografía, llegar hasta el patio de butacas y elegir... Pero no permite adjuntar al carro de compra. Entonces, ¿para qué demonios está activado el servicio?
7.- ¿Por qué sólo se disponen varias taquillas para la venta, dándose espectáculos lamentables de gente enbroncada, titis de Cai en connivencia con agentes de la policía local, gritos verduleros y la más penosa imagen de esta ciudad condensada en una cola?
8.- ¿Por qué los periodistas no ponen hoy a parir a Vicente Sánchez y el Diario de Cádiz sí se dedica a lloriquear porque no le han dado una credencial a su área digital? ¿Y a mí qué carajo me importa que entréis uno menos, si ya sois muchos de gañote?
9.- ¿Por qué no hay taquillas en la provincia, de donde vienen muchas agrupaciones?
10.- ¿Para cuándo dejaremos de ser, como decía JCA en una de sus letras, un 'poblado cebollero'?
1.- ¿Cómo es posible que la venta de entradas por internet sólo se destine para un 20% del aforo?
2.- ¿Cómo es posible que se cuente con un portal que se satura a los pocos minutos de comenzar a funcionar?
3.- Si fue un hacker, ¿cómo es posible que un portal de garantías que vende entradas y comercia con números de tarjetas de crédito (www.interentradas.com) sea tan vulnerable?
4.- Si se quiere evitar la reventa, ¿por qué no se vende todo el papel por internet y en un servidor de calidad como se merece un evento seguido en toda España?
5.- ¿Por qué el concejal de Fiestas, el inepto de Vicente Sánchez, no da la cara y el Ayuntamiento y el Patronato del Carnaval no dan explicaciones claras y actualizadas de lo que sucede?
6.- A día de hoy, se puede observar por internet lo que veis en la fotografía, llegar hasta el patio de butacas y elegir... Pero no permite adjuntar al carro de compra. Entonces, ¿para qué demonios está activado el servicio?
7.- ¿Por qué sólo se disponen varias taquillas para la venta, dándose espectáculos lamentables de gente enbroncada, titis de Cai en connivencia con agentes de la policía local, gritos verduleros y la más penosa imagen de esta ciudad condensada en una cola?
8.- ¿Por qué los periodistas no ponen hoy a parir a Vicente Sánchez y el Diario de Cádiz sí se dedica a lloriquear porque no le han dado una credencial a su área digital? ¿Y a mí qué carajo me importa que entréis uno menos, si ya sois muchos de gañote?
9.- ¿Por qué no hay taquillas en la provincia, de donde vienen muchas agrupaciones?
10.- ¿Para cuándo dejaremos de ser, como decía JCA en una de sus letras, un 'poblado cebollero'?
martes, 8 de enero de 2008
Un gran trío
Se acabó la Navidad. Dejar el árbol al lado de un contenedor tras pavonear de él durante un mes, ¿es correcto? Si dejamos el árbol, ¿también abandonamos a su vera (luque) los sentimientos de paz y armonía que nos han invadido durante semanas?
En once meses vuelve la fiesta más maravillosa del año. Para entonces, habrán cambiado cosas en nuestra vida. Algunos serán millonarios y hoy son desempleados, otros verán a sus hijos nacer, unos encontrarán personas con quienes compartir sus vidas... Una parte perderán su trabajo pero saldrán adelante, dejarán a sus parejas y encontrarán otras si lo desean y las fotos del año anterior serán pura anécdota. Y los más, seguirán prácticamente igual.
Queda una larga carrera de once meses por vivir antes de que volvamos a por las uvas en las que introducimos nuestros deseos cuando nos las llevamos a la boca. Así que a vivirlos apasionadamente, con ánimo y fuerza.
Después de Navidad llega el Carnaval y la Semana Santa. Vaya trío hasta marzo, qué estrés. Desmonto el Belén y me voy para el Falla, escucho una comparsa y voy a un Víacrucis, preparo mis túnicas de la Misericordia y Santo Entierro y...comenzará a oler a verano tras el preludio primaveral.
Ah, y un año más viejo, que mañana es mi cumpleaños.
En once meses vuelve la fiesta más maravillosa del año. Para entonces, habrán cambiado cosas en nuestra vida. Algunos serán millonarios y hoy son desempleados, otros verán a sus hijos nacer, unos encontrarán personas con quienes compartir sus vidas... Una parte perderán su trabajo pero saldrán adelante, dejarán a sus parejas y encontrarán otras si lo desean y las fotos del año anterior serán pura anécdota. Y los más, seguirán prácticamente igual.
Queda una larga carrera de once meses por vivir antes de que volvamos a por las uvas en las que introducimos nuestros deseos cuando nos las llevamos a la boca. Así que a vivirlos apasionadamente, con ánimo y fuerza.
Después de Navidad llega el Carnaval y la Semana Santa. Vaya trío hasta marzo, qué estrés. Desmonto el Belén y me voy para el Falla, escucho una comparsa y voy a un Víacrucis, preparo mis túnicas de la Misericordia y Santo Entierro y...comenzará a oler a verano tras el preludio primaveral.
Ah, y un año más viejo, que mañana es mi cumpleaños.
viernes, 4 de enero de 2008
Los Magos de Oriente
Faltan horas para que llegue la noche más mágica del año. La tradición marcaba hace décadas que en realidad, la fiesta de los Reyes Magos estaba plenamente dedicada a los niños. Un regalo hecho con cariño en función de la economía familiar depositado al lado de la cama del pequeño se convertía en el gesto más emotivo del año en el seno familiar.
Hace relativamente poco tiempo que esta costumbre de regalar presentes el 6 de enero se extendió a los adultos. La emancipación económica de las familias y, obviamente, la comercialización del verdadero sentido de la efeméride de la Epifanía, hicieron que actualmente los regalos de Reyes se hayan convertido en algo en lo que no prima la edad del que recibe los presentes. Al menos la ilusión se prolonga a más seres humanos y eso siempre es positivo.
¿Quiénes serían los Reyes Magos? Para empezar, está cada vez más claro que no eran magos, quizás ni monarcas. Una traducción bastante libre los designó prácticamente como alquimistas, pero en realidad el término 'magoi' se refiere a 'sabios', lo que no significa que practicaran la magia, y menos aún que quienes ejercían actividades de esta índole tan incorrecta para la religión, adoraran a Jesús... En el Evangelio de Mateo se citan, pero casi como una anécdota. No se dice el nombre de cada uno de ellos, ni siquiera su procedencia, y menos aún que eran tres. De hecho, existen pinturas donde se aprecian dos, cuatro,...
Sus nombres proceden de los Evangelios Apócrifos, los textos que la Iglesia no los considera como oficiales pero tampoco los rechaza. Recomienda incluso su lectura pero con cautela, ante inexactitudes históricas diáfanas o hechos demasiado fantasiosos. Pero...¿acaso estas dos características no las poseen muchos avatares reconocidos como oficiales en la Biblia? Melchor, Gaspar y Baltasar, dicen los Apócrifos de la Natividad, que se llamaban. En el Evangelio Apócrifo de Pseudo Mateo -se supone que son aportaciones del evangelista a su texto 'reconocido', aunque algunas fuentes hablan de que lo escribió Santiago el Menor-, se especifica claramente que los Magos tardaron nada menos que 24 meses en llegar. "Después de transcurridos dos años, vinieron a Jerusalén unos magos procedentes de Oriente...". Así que de adoración a las pocas horas de nacer, según este texto, nada de nada...
Incluso parece que José se enfrentó a ellos porque no se fiaba de estos tipos tan extraños y les hizo preguntas antes de que pudieran entrar a ver a Jesús, según el Apócrifo del 'Liber Infantia Salvatoris'. Y el Evangelio apócrifo Árabe de la Infancia cuenta que María les entregó a los Magos unos pañales del Niño Dios. Fijaos qué curioso el texto...: "Y salieron a su encuentro los reyes y los príncipes, preguntándoles qué era lo que habían visto o hecho, cómo habían efectuado la ida y la vuelta y qué habían traído consigo. Ellos les enseñaron este pañal que les había dado María, por lo cual celebraron una fiesta y, según su costumbre, encendieron fuego y lo adoraron. Después arrojaron el pañal sobre la hoguera y al momento fue contraído por el fuego. Mas cuando éste se extinguió, sacaron el pañal en el mismo estado en que estaba antes de arrojarlo, por lo cual empezaron a besarlo y a colocarlo sobre sus cabezas...".
Otras historias citan a un cuarto mago llamado Artabán en una hermosa leyenda que algunos adjudican al teólogo presbiteriano Henry van Dyke, si bien parece que ya antes de 1896 existían textos antiguos que hablaban de él. Se dice que era el más poderoso, el más rico, pero llegó tarde a la cita con sus tres colegas porque se quedó por el camino atendiendo necesidades de varios desgraciados a los que regaló los presentes que en principio llevaba para el Niño. Su brioso caballo corrió hasta morir extenuado y, cuando Artabán llegó a Judá, contempló la matanza de los inocentes, quiso sobornar a un soldado con un rubí que portaba pero el sicario, al verle ya harapiento tras el tortuoso camino, creyó que había robado la joya, lo arrestó y el cuarto mago se llevó treinta años en la cárcel. Justo cuando Pilatos lo dejó libre, Artabán se dejó arrastrar por una multitud que lo llevó hasta los pies de un desconocido crucificado, donde encontró al Niño Dios que buscaba. Eso resumiendo, claro...
Os recomiendo los Apócrifos de Aurelio Santos Otero, editado por la Biblioteca de Autores Cristianos.
Felices Magos, amigos/as.
Hace relativamente poco tiempo que esta costumbre de regalar presentes el 6 de enero se extendió a los adultos. La emancipación económica de las familias y, obviamente, la comercialización del verdadero sentido de la efeméride de la Epifanía, hicieron que actualmente los regalos de Reyes se hayan convertido en algo en lo que no prima la edad del que recibe los presentes. Al menos la ilusión se prolonga a más seres humanos y eso siempre es positivo.
¿Quiénes serían los Reyes Magos? Para empezar, está cada vez más claro que no eran magos, quizás ni monarcas. Una traducción bastante libre los designó prácticamente como alquimistas, pero en realidad el término 'magoi' se refiere a 'sabios', lo que no significa que practicaran la magia, y menos aún que quienes ejercían actividades de esta índole tan incorrecta para la religión, adoraran a Jesús... En el Evangelio de Mateo se citan, pero casi como una anécdota. No se dice el nombre de cada uno de ellos, ni siquiera su procedencia, y menos aún que eran tres. De hecho, existen pinturas donde se aprecian dos, cuatro,...
Sus nombres proceden de los Evangelios Apócrifos, los textos que la Iglesia no los considera como oficiales pero tampoco los rechaza. Recomienda incluso su lectura pero con cautela, ante inexactitudes históricas diáfanas o hechos demasiado fantasiosos. Pero...¿acaso estas dos características no las poseen muchos avatares reconocidos como oficiales en la Biblia? Melchor, Gaspar y Baltasar, dicen los Apócrifos de la Natividad, que se llamaban. En el Evangelio Apócrifo de Pseudo Mateo -se supone que son aportaciones del evangelista a su texto 'reconocido', aunque algunas fuentes hablan de que lo escribió Santiago el Menor-, se especifica claramente que los Magos tardaron nada menos que 24 meses en llegar. "Después de transcurridos dos años, vinieron a Jerusalén unos magos procedentes de Oriente...". Así que de adoración a las pocas horas de nacer, según este texto, nada de nada...
Incluso parece que José se enfrentó a ellos porque no se fiaba de estos tipos tan extraños y les hizo preguntas antes de que pudieran entrar a ver a Jesús, según el Apócrifo del 'Liber Infantia Salvatoris'. Y el Evangelio apócrifo Árabe de la Infancia cuenta que María les entregó a los Magos unos pañales del Niño Dios. Fijaos qué curioso el texto...: "Y salieron a su encuentro los reyes y los príncipes, preguntándoles qué era lo que habían visto o hecho, cómo habían efectuado la ida y la vuelta y qué habían traído consigo. Ellos les enseñaron este pañal que les había dado María, por lo cual celebraron una fiesta y, según su costumbre, encendieron fuego y lo adoraron. Después arrojaron el pañal sobre la hoguera y al momento fue contraído por el fuego. Mas cuando éste se extinguió, sacaron el pañal en el mismo estado en que estaba antes de arrojarlo, por lo cual empezaron a besarlo y a colocarlo sobre sus cabezas...".
Otras historias citan a un cuarto mago llamado Artabán en una hermosa leyenda que algunos adjudican al teólogo presbiteriano Henry van Dyke, si bien parece que ya antes de 1896 existían textos antiguos que hablaban de él. Se dice que era el más poderoso, el más rico, pero llegó tarde a la cita con sus tres colegas porque se quedó por el camino atendiendo necesidades de varios desgraciados a los que regaló los presentes que en principio llevaba para el Niño. Su brioso caballo corrió hasta morir extenuado y, cuando Artabán llegó a Judá, contempló la matanza de los inocentes, quiso sobornar a un soldado con un rubí que portaba pero el sicario, al verle ya harapiento tras el tortuoso camino, creyó que había robado la joya, lo arrestó y el cuarto mago se llevó treinta años en la cárcel. Justo cuando Pilatos lo dejó libre, Artabán se dejó arrastrar por una multitud que lo llevó hasta los pies de un desconocido crucificado, donde encontró al Niño Dios que buscaba. Eso resumiendo, claro...
Os recomiendo los Apócrifos de Aurelio Santos Otero, editado por la Biblioteca de Autores Cristianos.
Felices Magos, amigos/as.
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